El gobierno de Donald Trump ha anunciado recientes acuerdos con Argentina, Guatemala, Ecuador y El Salvador que incluyen la disminución de aranceles en sectores clave como el agrícola y textil. A cambio, estos países abrirán sus mercados a una variedad de productos estadounidenses y otros compromisos. La firma de estos pactos se espera para las próximas semanas.
Desde la Casa Blanca se ha comunicado que estos acuerdos ‘históricos’ tienen el objetivo de reducir los costos de alimentos básicos y calmar la inquietud de los electores tras los reveses políticos de Trump a inicios de noviembre. En respuesta a las victorias demócratas en importantes cargos en Estados Unidos, estos pactos también buscan fortalecer la economía y los programas sociales.
El más destacado de estos acuerdos ha sido el firmado con Argentina, donde, según la Casa Blanca, el gobierno de Javier Milei otorgará un acceso preferencial a ciertos productos estadounidenses. Milei ha expresado en X que este acuerdo es un ‘enorme reconocimiento a (su) programa económico’ y pone a Argentina en una posición privilegiada en términos de comercio internacional.
En cuanto a Guatemala, El Salvador y Ecuador, los acuerdos se enfocan en la baja de aranceles para productos esenciales como el plátano y el café, que son de gran importancia para sus economías y no se producen en Estados Unidos. Los presidentes de estos países han expresado su satisfacción a través de diversos medios, destacando las ventajas que estos acuerdos traerán a sus economías.
Estos pactos comerciales, aunque limitados por las regulaciones de bloques como el Mercosur en el caso de Argentina, prometen fortalecer las relaciones y el intercambio comercial entre Estados Unidos y estos países latinoamericanos, proporcionando beneficios mutuos y mejorando el acceso a mercados clave.
