Al menos una veintena de personas han perdido la vida este domingo en la provincia marroquí de Safi, situada a unos 300 kilómetros de Rabat, como consecuencia de las inundaciones generadas por las intensas lluvias registradas en la zona, según el último balance facilitado por las autoridades locales.
De acuerdo con el diario digital Hespress, al menos 21 personas han fallecido y 32 han resultado heridas, aunque la mayor parte de los heridos fueron dados de alta tras recibir atención médica. Las víctimas se han producido por unas inundaciones repentinas y muy intensas, desencadenadas en un intervalo de aproximadamente una hora, que afectaron a unas 70 viviendas y establecimientos comerciales del casco histórico de la ciudad de Safi.
Las lluvias torrenciales también provocaron daños materiales de consideración: alrededor de una decena de vehículos fueron arrastrados por el agua y un tramo de carretera quedó seriamente afectado, lo que ocasionó cortes e incidencias en el tráfico en varias vías de la localidad.
La Dirección General de Meteorología (DGM) ha señalado que este episodio está vinculado a fuertes tormentas que continúan afectando a buena parte del territorio marroquí y que, según sus previsiones, podrían prolongarse hasta el martes en todo el país.