El veterano de las fuerzas especiales de Estados Unidos que colaboró en la salida de la líder opositora venezolana María Corina Machado de Venezuela ha rechazado que el expresidente estadounidense Donald Trump lo contratara y ha reiterado que Washington “no ha invertido ni un solo centavo” en la operación.
El exmilitar, Bryan Stern, presidente de la Fundación de Rescate Grey Bull, ha indicado que la misión se financió gracias a “algunos donantes”, subrayando que “ninguno de ellos es un alto cargo estadounidense”. “El Gobierno de Estados Unidos no ha contribuido, al menos que yo sepa”, ha afirmado en una entrevista concedida a la cadena CBS.
Stern ha detallado que su organización llegó a colaborar “de forma no oficial” con el Ejército estadounidense para diseñar la operación y “evitar ser detectados”, aunque ha evitado confirmar si Machado pasó por Curazao antes de volar a Oslo, capital de Noruega.
Según su relato, la opositora, que finalmente no llegó a tiempo de recoger el premio Nobel de la Paz, fue trasladada en primer lugar hasta un punto de encuentro en alta mar, donde él la recibió antes de dirigirse a un destino que no ha querido hacer público.
“No me reuní con ella en Curazao, sino en otro sitio verdaderamente lejos de allí. Extremadamente lejos”, ha señalado, remarcando que “el momento en que se subió al barco fue el más peligroso de toda la operación”. “Es la única premio Nobel de la Paz que ha sido objeto de algo así”, ha añadido.
El veterano ha indicado que decenas de personas participaron directamente en la planificación, que requirió labores de Inteligencia, servicios de traducción y apoyo logístico. Stern y su empresa asumieron la responsabilidad de la parte terrestre y marítima, así como de la extracción, aspectos que fueron “planificadas durante cuatro días”, según ha precisado.
En conjunto, ha explicado, la operación se prolongó durante casi 16 horas de “rescate” hasta que “fue puesta rumbo a Noruega de forma segura para recoger el premio Nobel y reunirse con su familia”. “Gran parte de ese periodo lo pasó en el mar, donde no disfrutó del trayecto debido a las malas condiciones meteorológicas”, ha indicado.
“Fue peligroso, daba miedo. Las condiciones del mar no eran las más deseables, con grandes olas que hacían que fuera difícil para el sistema de radares”, ha relatado el exmilitar, que considera que esta misión ha sido el “mayor desafío” afrontado por su fundación.
“No es una simple portavoz que no quiere estar más en Venezuela. Esto era como trasladar a una estrella del rock. Es la primera nobel de la Paz que es rescatada, la primera cuya cara está en pancartas y carteles. Nunca habíamos rescatado a nadie con su estatus”, ha apuntado.
Volver a Venezuela
Respecto a la posibilidad de que Machado regrese a Venezuela, como ella misma ha sugerido, Stern le ha desaconsejado dar ese paso. “Creo que está loca al pensar esto, pero ella es muy fuerte, no la llaman la dama de hierro por nada”, ha manifestado.
“Se lo he dicho: no vuelvas”, ha recalcado, advirtiendo de que su equipo “nunca ha tratado de introducir a nadie en un país”. “Solo hemos hecho extracciones, nunca al revés. Es ella quien tiene que decidir si volver, pero creo que no debería hacerlo. Pero quiere, y es toda una inspiración”, ha concluido.
Machado reiteró el jueves su intención de regresar a Venezuela tras haber sido premiada en Oslo, ciudad a la que llegó después de pasar cerca de un año en paradero desconocido tras las elecciones presidenciales de 2024 en Venezuela, en las que su candidatura fue vetada en favor de la del también opositor Edmundo González.
