Volker Turk, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ha expresado su preocupación el pasado jueves sobre el creciente número de represalias que el gobierno de Estados Unidos ha impuesto al Tribunal Penal Internacional (TPI), especialmente tras el anuncio de Washington de imponer nuevas sanciones a cuatro integrantes de la corte, quienes han participado en investigaciones contra Israel y Estados Unidos.
En sus declaraciones, Turk ha mencionado que estas acciones deberían motivar a la comunidad internacional a proteger más al TPI y a su personal, enfatizando que la intensificación de las represalias estadounidenses debe cesar. Sancionar a jueces y fiscales a nivel nacional, regional o internacional por cumplir con su trabajo en el marco de los estándares internacionales es un asalto al Estado de derecho y socava el sistema judicial, ha advertido en un comunicado.
Por consiguiente, ha solicitado la eliminación inmediata de dichas sanciones y ha instado a los Estados a tomar medidas para proteger a los afectados y colaborar para impedir la ejecución de estas sanciones. Mientras, pido a los Estados que tomen medidas para protegerlos y que cooperen para que estas sanciones no se hagan efectivas, ha añadido.
Finalmente, ha reiterado la importancia de defender las instituciones creadas para la protección de los Derechos Humanos y el Estado de derecho. Los países deben defender las instituciones que han creado para salvaguardar los Derechos Humanos y el Estado de derecho. Aquellos que trabajan para documentar, investigar y perseguir violaciones del Derecho Internacional no deben trabajar con miedo, ha concluido.
