Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha reafirmado su compromiso este martes de utilizar la liquidez de los activos rusos congelados en Europa como préstamo para apoyar a Ucrania en su conflicto actual, destacando que su propuesta es “sólida” aunque existen ciertas incertidumbres técnicas que aún deben ser abordadas por los líderes de la UE.
Desde Suecia, en el Consejo Nórdico, Von der Leyen ha señalado que los servicios de la Comisión están evaluando cómo utilizar estos activos inmovilizados. “La propuesta consiste en utilizar estos saldos para conceder un préstamo a Ucrania. Ucrania tendrá que devolverlo si Rusia paga las reparaciones”, ha enfatizado, añadiendo que se trata de una propuesta legalmente sólida, no trivial. Tras la última cumbre, se prepararán varias opciones para el uso de estos bienes, considerando las reservas de Bélgica y otros estados miembros.
En reuniones con líderes nórdicos y bálticos, el apoyo a la medida fue evidente. El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, subrayó que, aunque no se alcanzó un acuerdo final en la última cumbre, se dio un paso importante y necesario hacia una decisión. Mette Frederiksen, primera ministra danesa, declaró que no hay alternativa al préstamo de reparación y que es esencial resolver algunas cuestiones técnicas pero es, sobre todo, una decisión política. Petteri Orpo, primer ministro finlandés, instó a alcanzar un acuerdo en la próxima cumbre de líderes europeos en diciembre, esperando que para entonces se aclaren las dudas de Bélgica, que alberga la mayoría de los bienes rusos y podría enfrentarse a futuras reclamaciones.
DUDAS TRAS LA CUMBRE EUROPEA
La cumbre europea reciente encargó al Ejecutivo europeo definir la base legal para un préstamo de 140.000 millones euros que sostenga a Ucrania durante los próximos dos años, en un contexto de ataques continuos por parte de Rusia y sin avances hacia la paz. Sin embargo, las dudas sobre la legalidad de la propuesta persisten dentro de la UE, especialmente por parte de Bélgica que podría vetar la iniciativa si no se ofrecen garantías suficientes ni se incluyen los activos inmovilizados en otras partes de la UE.
Paula Pinho, portavoz comunitaria, mencionó que se consideran todas las opciones, pero que la prioridad son los bienes inmovilizados mientras no se descarten otras posibilidades. Fuentes europeas indicaron que la cumbre demostró un claro interés en financiar a Ucrania, aunque aún quedan aspectos por resolver. “El trabajo técnico continuará en las próximas semanas para resolver las dudas. Bélgica no fue el único país con preguntas sobre el préstamo de reparación”, concluyeron, señalando que el uso de la liquidez de los activos inmovilizados sigue siendo una opción viable.















