El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, ha comunicado este domingo un conjunto de medidas económicas para intentar calmar las recientes protestas en el país. Entre estas medidas, se incluyen reducciones en los precios de los alimentos y establecimiento de límites a los tipos de interés. Estas acciones buscan responder a las manifestaciones que han surgido como respuesta inicial a la falta de claridad gubernamental tras un trágico suceso en Novi Sad, donde 15 personas perdieron la vida en noviembre pasado.
Las manifestaciones, aunque han disminuido en intensidad, continúan siendo motivo de preocupación para entidades internacionales, incluyendo la Embajada de Estados Unidos en Belgrado, que ha emitido alertas anticipando más marchas con ‘decenas de miles de participantes’. En este contexto, Vucic ha anunciado en un discurso televisivo que la próxima semana se implementará un decreto que limitará los márgenes de beneficio al 20 por ciento y reducirá los precios de 23 categorías de productos, abarcando alrededor de 3.000 artículos en total.
Además, el presidente ha declarado que los intereses de los préstamos personales ‘no superará el 7,5 por ciento’ y ha prometido ventajas en los préstamos hipotecarios: ‘Se acepta la refinanciación sin costes adicionales ni habrá costes de tramitación del préstamo. Cero dinares’. Vucic ha expresado su disposición a revisar las peticiones de los manifestantes y ha invitado a los ciudadanos a proponer más temas a tratar, reiterando su disposición a dialogar con los principales representantes de los protestantes.
En su conclusión, Vucic ha enfatizado que ‘con todo sumado, millones de ciudadanos de Serbia se beneficiarán enormemente de estas medidas’, reforzando su compromiso de atender las demandas ciudadanas en medio de este periodo de agitación social.