Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, ha expresado su preocupación este lunes por el hallazgo de componentes de fabricación aliada en el arsenal ruso, instando a los líderes del G7 a implementar sanciones más rigurosas y efectivas.
Zelenski ha revelado que no solo se encuentran componentes de origen chino, como había indicado anteriormente, sino también de naciones como Estados Unidos, Taiwán, Reino Unido, Japón, Corea, Alemania y Suiza.
Tras casi cuatro años desde el comienzo de la invasión, Rusia continúa adquiriendo piezas para su armamento, según ha comunicado Zelenski en sus redes sociales. Ha especificado que se han descubierto 102.785 componentes en aproximadamente 540 proyectiles, incluyendo misiles y drones, utilizados en un ataque la noche del 5 de octubre.
Detalladamente, unos 100.700 componentes extranjeros fueron encontrados en drones y cerca de 1.500 en misiles balísticos de corto alcance Iskanders; aproximadamente 190 en los hipersónicos Kinzhal y 405 en los misiles de crucero de alta precisión Kalibr.
«En particular, las empresas de Estados Unidos fabrican convertidores para misiles Kh-101 y drones de tipo Shahed/Geran, sensores para esos drones y para misiles Kinzhal, convertidores de analógico a digital para drones y misiles, y microelectrónica para misiles», ha detallado Zelenski.
El presidente ucraniano ha informado que ya se ha comunicado esta situación a sus aliados para que activen los mecanismos necesarios y corten este flujo de suministros. «Ya poseen los datos detallados sobre cada empresa y cada producto, saben a qué dirigirse y cómo responder», afirmó.
Ante una reunión próxima con el G7, Zelenski ha expresado su esperanza en que se adopten medidas decisivas «para asegurar que las sanciones sean verdaderamente efectivas».
«Es crucial cerrar todo esquema que elude las sanciones porque Rusia usa cada uno de ellos para seguir matando. El mundo tiene el poder de detener esto», concluyó el mandatario.