En un reciente ataque nocturno sobre Ucrania, las Fuerzas Armadas rusas han dejado múltiples heridos tras bombardear la localidad de Ojtirka, en la provincia de Sumi. Este incidente ha sido condenado por el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quien ha reiterado la necesidad de incrementar la presión internacional sobre Moscú.
Concretamente, la ofensiva incluyó el lanzamiento de aproximadamente 15 drones que impactaron en la zona nororiental de Ucrania, poco después de la medianoche del miércoles. La Fiscalía de Sumi reportó que el ataque resultó en la destrucción de varios edificios residenciales y 14 personas resultaron heridas, incluyendo tres menores y un bebé de pocos meses.
Las alarmas también se activaron en otras regiones como Chernígov, Járkov, Poltava y en Kostantínovka, en Donetsk. En esta ocasión, más de 60 drones y un misil balístico fueron empleados en los ataques, como destacó Zelenski a través de sus redes sociales.
«Todos estos ataques demuestran y confirman la necesidad de presionar a Moscú y de imponer nuevas sanciones y aranceles hasta que la diplomacia funcione plenamente», enfatizó Zelenski, quien acaba de regresar de un viaje a la Casa Blanca donde se discutió la posibilidad de un encuentro directo con Vladimir Putin.
En su visita a Washington, Zelenski subrayó la importancia de que Ucrania reciba «fuertes garantías de seguridad» en un futuro acuerdo de paz con Rusia, asegurando que estas son esenciales para una paz estable y duradera. «Necesitamos fuertes garantías de seguridad para asegurar una paz verdaderamente segura y duradera», afirmó.
