El parlamentario del Partido Popular, Alberto Fabra, ha anunciado este viernes su decisión de abandonar la Comisión de Defensa del Congreso, de la cual era presidente desde el comienzo de la legislatura. Esta medida busca prevenir un eventual «conflicto de intereses», tras la adquisición de la empresa donde trabaja su hijo por parte de Escribano, firma del mismo sector.
En una intervención ante los medios de comunicación después de un desayuno informativo, Fabra ha comunicado que tomó la decisión de renunciar a su cargo consultando previamente con su partido, liderado por Alberto Núñez Feijóo, ya que no desea que su posición en la comisión pueda afectar de alguna manera a la agenda política del PP.
«Creo que eso puede generar un conflicto de intereses, de manera que me echo al lado para que haya otro compañero», indicó el ex presidente de la Comunidad Valenciana entre 2011 y 2015, cuya renuncia se conocía tras una publicación de ‘El Confidencial’ ligada a sus conexiones familiares con Escribano Mechanical & Engineering.
A pesar de su salida de la comisión, Fabra seguirá siendo diputado, como confirmaron fuentes del parlamento a Europa Press. El político del PP recibe un sueldo mensual de 6.960 euros, incluyendo un suplemento de 1.646 euros por su rol en la comisión.
Por otro lado, Escribano, en proceso de fusión con Indra, ya posee el 14,3% del capital de esta empresa tecnológica, situándose como su segundo mayor accionista después de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que detenta un 28%.











