El representante gubernamental en Baleares, Alfonso Rodríguez, ha reiterado su preocupación sobre la eventual necesidad del archipiélago de solicitar la derivación de menores extranjeros no acompañados a otras regiones, a pesar de su actual rechazo a recibir a 49 menores de Canarias.
En una entrevista con Europa Press, Rodríguez ha alertado a Marga Prohens, presidenta del Govern, sobre los peligros de impugnar ante el Tribunal Constitucional lo que ha llamado una «solución estructural» para la acogida de estos menores. «Por eso le decía que cuidado con llevar a un contencioso esta solución estructural, porque a lo mejor dentro de unos meses o de un año, no lo sabemos, pero quizá pueda pedirla para su propia comunidad», subrayó Rodríguez.
El funcionario ha indicado que Baleares ya supera el doble de su capacidad de acogida habitual para menores migrantes, lo cual la aproxima a una posible declaración de contingencia migratoria y a la derivación de menores a otras comunidades, como estipula el decreto vigente.
Además, Rodríguez ha mencionado que, aunque no puede asegurar si el Govern cambiará de postura tras meses de oposición a esta medida, lo que «insinuó» Sandra Fernández, la nueva consellera de Familias, Bienestar Social y Atención a la Dependencia, es que podrían solicitar ayuda a otras comunidades en el futuro. «¿Pero cómo la pedirán? ¿Y que está haciendo Canarias desde hace años? ¿Y qué comunidades le están echando una mano? Tenemos que afrontar una realidad desde el interés superior del menor, que es su protección, y la idea de que es un fenómeno de país al que hay que dar solución como país, y todas las comunidades tienen que colaborar. Más allá de todo esto es ruido», concluyó.