El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, expresó su frustración porque las «medidas represivas, de prevención, de lo que sea» en la lucha contra los incendios forestales «se caen» ante las acciones de «desalmados» que inician fuegos, como los recientes en A Cañiza (Pontevedra). Este último episodio obligó al confinamiento de habitantes de siete localidades tras originarse en múltiples focos a lo largo de una carretera.
«Cuanto menos abandono haya en el monte, unido a cuanta más concienciación haya sobre las consecuencias forestales, iremos avanzando más y todo eso lo podemos plasmar en una ley muchísimo mejor. Pero hay cosas que las leyes no pueden hacer. Dependen de las personas», reflexionó Rueda en una entrevista con Europa Press sobre la futura ley de prevención de incendios forestales.
Solicita además «una concienciación de la gente sobre el mal que hace, de cómo pone en peligro (…) desde luego propiedades e incluso la vida de las personas». Admite que es «muy difícil» identificar a los autores de los incendios y, a menudo, incluso cuando se detiene a un pirómano, «tener las pruebas suficientes para poder condenarlos».
En su compromiso con no «bajar la guardia», afirma: «Los incendiarios tienen que saber que se hace todo lo posible para averiguar quiénes son y que caiga todo el peso de la ley». Rueda destaca la importancia de la colaboración con los ayuntamientos para asegurar que «los vecinos tienen la obligación de limpiar las franjas cerca de las casas», logrando progresos significativos, especialmente «en los núcleos habitados».
MORATORIA AL EUCALIPTO
Sobre la moratoria a la plantación de eucaliptos, que finaliza a fin de año, Rueda señaló que tras «bastantes consultas internas con todos los afectados», la decisión final «probablemente no contentará a todo el mundo» pero será «lo más consensuada y lo más entendible posible». «Aquí hay muchos intereses y muchos factores diferentes a tener en cuenta y, al final, gobernar es decidir. Nos corresponde a nosotros decidir», comentó, y agregó que se han tomado «el mes de agosto para recopilarlo todo».
CONFIANZA EN EL DIRECTOR CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA
En cuanto a la polémica sobre las políticas de la Xunta contra la violencia machista, en respuesta al informe del Consello de Contas que instó a asignar más recursos a la prevención, Rueda argumentó que «el presupuesto ha aumentado», pero también la necesidad de «dedicar más a atender a las víctimas, a sus hijos…», aunque sigue invirtiendo en «las políticas puras de prevención». Defiende que «Galicia es la única comunidad autónoma que les proporciona a las víctimas, durante un tiempo que se estima necesario para que puedan separarse ya completamente, hacer una vida independiente de su maltratador, una aportación al mes». Sobre las críticas a su director xeral de Loita contra a Violencia de Xénero, Roberto Barba, Rueda enfatiza su confianza en él, describiéndolo como un juez «muy especializado y muy concienciado» y criticando la actitud de la oposición por pedir su destitución.