Fernando Agustín Merino, antiguo directivo de Acciona tanto en Navarra como en La Rioja, ha optado por ejercer su derecho a no declarar ante la comisión del Senado que investiga las diversas vertientes del ‘caso Koldo’. No obstante, ha precisado que su vínculo con el exasesor ministerial Koldo García Izaguirre se circunscribe exclusivamente al proyecto Mina Muga.
Este anuncio lo realizó al principio de su intervención, convocado por la mayoría del PP en el Senado, donde se buscaba esclarecer su rol dentro de esta complicada trama. Aunque Merino ya había declarado en el Tribunal Supremo en julio, reiteró que su relación con Koldo en Navarra era estrictamente profesional y limitada al mencionado proyecto. Incluso detalló que las responsabilidades de García en el proyecto eran las de ‘conserje’ y ‘chófer’ para los directivos australianos.
Respecto a Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, Merino aclaró que sus encuentros han sido personales y nunca profesionales. Subrayó que fue él quien buscó el contacto con Cerdán, pero siempre desde un interés por relacionarse con figuras políticas y empresariales de la región.
En su discurso inicial, Merino recordó sus 30 años de trayectoria en Acciona, la mitad de ellos en Navarra, describiéndose como alguien más cercano a los entornos de obra que a los despachos. Aseguró que su participación se limitaba a colaborar en la evaluación y análisis de costos de las obras, sin tener influencia en las licitaciones ni en la gestión directa de los proyectos.
