El encuentro celebrado entre PSOE y las formaciones de Sumar no ha logrado desactivar la crisis abierta en la coalición y las fricciones continúan, después de que el socio minoritario haya reprochado a los socialistas la ausencia de progresos reales más allá de las “buenas palabras”. Además, advierten al sector socialista de que no puede caer en la tentación de “bunkerizarse” en Moncloa y en Ferraz.
Así lo han expresado en un comunicado conjunto Movimiento Sumar, IU, Más Madrid y Comunes tras la reunión mantenida este viernes en el Congreso, que se ha prolongado durante una hora y media.
En representación del PSOE han asistido la secretaria de Organización, Rebeca Torró, y su adjunto en esta área, Borja Cabezón. Por parte de Sumar han acudido la coordinadora, Lara Hernández, la responsable de Organización de IU, Eva García Sempere, el dirigente de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño, y la secretaria de Organización de los Comunes, Lidia Muñoz. Tal y como se había avanzado, ningún ministro ha participado en la cita, circunscrita al plano estrictamente orgánico de los partidos.
Las fuerzas integradas en Sumar han afeado que la postura “inmovilista” del PSOE solo contribuye al “desánimo progresista”, “refuerza la antipolítica” y “alimenta a PP y Vox”. “Más allá de la cordialidad y las buenas palabras, la reunión mantenida hoy no ha supuesto ningún avance significativo”, han subrayado.
Riesgos para el “acuerdo de investidura” y exigencia de cambios
Asimismo, se han comprometido a adoptar las medidas necesarias para asegurar que el programa de gobierno se lleva a cabo, aunque alertan de que “la persistencia en este bloqueo a la legislatura pondría en riesgo el acuerdo de investidura, algo que no debería permitirse teniendo tantos retos por delante”.
Desde Sumar han reiterado a la parte socialista la urgencia de sacar adelante iniciativas como la prórroga de los contratos de alquiler que expiran este año o la prestación universal por crianza, además de dar pasos en nuevas medidas anticorrupción y contra el acoso sexual.
En esta reunión, y también en la mantenida días atrás entre el presidente, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, el espacio de Sumar ha insistido en que el PSOE debe ofrecer explicaciones públicas por los escándalos que le afectan, imprimir un “impulso social” al Ejecutivo y reformular el Gobierno para afrontar la segunda mitad de la legislatura.
El socio minoritario sostiene que es consciente de que el Ejecutivo se enfrenta a “una élite judicial, económica y política” que intenta frenar el cambio en España con “todos los medios a su alcance”, pero recalca que eso “no puede convertirse en una excusa para bunkerizarse en Ferraz y la Moncloa y no responder a una ciudadanía que exige explicaciones y transformaciones”. Por ello, reclaman que cese el inmovilismo.
Aun así, las organizaciones de Sumar aseguran que seguirán negociando dentro del Gobierno para que el Consejo de Ministros apruebe la continuidad del “escudo social”, es decir, la extensión de la prohibición de desahucios y de los cortes de suministros básicos a familias vulnerables, junto con medidas para contener los precios de la energía y de los alimentos. Paralelamente, presionarán para poner en marcha de inmediato la prórroga de los alquileres que vencen en 2025, con el objetivo de evitar incrementos de precios.
El PSOE destaca el tono constructivo mientras continúa el desencuentro
El PSOE, por su parte, “valora positivamente la reunión”, en la que ha reiterado que ambas formaciones comparten más puntos de acuerdo que diferencias y ha instado a seguir gobernando juntas.
“Tenemos que seguir mejorando la vida de la gente y, en ese camino común, el diálogo es y será la mejor herramienta para avanzar en acuerdos que beneficien a la mayoría social de este país”, trasladó la 'número tres' del partido según indica el PSOE en un comunicado.
Además, la delegación socialista ha detallado las actuaciones emprendidas frente a los casos de corrupción y acoso que motivaron la petición de este encuentro por parte de Sumar.
“La postura del PSOE ante cualquier indicio de corrupción es clara y firme: Tolerancia cero. Actuamos siempre con contundencia e inmediatez ante cualquier conducta que vaya en contra de los valores y principios que representan estas siglas. Lo hemos demostrado y lo seguiremos haciendo”, añadió Torró.
Con estas posiciones tan alejadas, el choque entre Sumar y el ala socialista continúa abierto desde que el pasado viernes la vicepresidenta segunda advirtiera de que el Gobierno no podía seguir funcionando en estas condiciones.
En los últimos días, varios ministros socialistas han tratado de rebajar la tensión con su socio, y el presidente del Gobierno, desde Bruselas, ha defendido que la coalición entre PSOE y Sumar debe mantenerse pese a las diferencias. También descartó que la crisis de Gobierno planteada por Díaz suponga un gesto de deslealtad.
Sobre la reunión reciente entre Sánchez y Díaz, fuentes de Sumar han apuntado que el encuentro resultó útil y que la ministra de Trabajo volvió a remarcar la gravedad del momento político.
Antes de que concluyera la cita de este viernes, el coordinador federal de IU, Antonio Maíllo, confiaba en que sirviera de base para convocar la comisión de seguimiento de la coalición, en la que participen ministros de ambas partes del Ejecutivo.