La líder de Podemos, Ione Belarra, ha lanzado un desafío al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, criticando su ‘cobardía’ durante la legislatura actual, lo que según ella, podría beneficiar al PP y a Vox en el futuro. Belarra ha sugerido ‘empezar de cero’ con una estrategia audaz para ‘reventar a la derecha’ y asegurar el triunfo de la izquierda en las futuras elecciones generales.
Belarra ha propuesto medidas radicales como la nacionalización de importantes corporaciones en sectores clave, amputar las ‘rémoras franquistas’ en la justicia mediante reformas legales, y la convocatoria de un referéndum sobre la monarquía para evitar el legado franquista del rey emérito Juan Carlos I, a quien ha tildado de ‘delincuente’. Mientras tanto, Sánchez ha rechazado estas ideas, enfatizando que su gobierno no se centrará en combatir a otros, sino en trabajar por el bienestar social mayoritario.
En una sesión plenaria en el Congreso, Belarra ha criticado el ‘discurso triunfalista’ de Sánchez sobre la economía, señalando las severas dificultades económicas que enfrentan muchas familias españolas. Además, ha acusado al gobierno de ignorar informes críticos como el de Foessa, que deberían haber activado alarmas sobre la situación económica del país.
Belarra también ha condenado la gestión del gasto militar y los escándalos de corrupción asociados al PSOE, lo que ha generado descontento y vergüenza entre los progresistas. Ha advertido que este ‘malestar social’ podría derribar al gobierno actual y resultar en una victoria electoral de la derecha, similar a lo ocurrido en Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump.
Finalmente, Belarra ha reclamado medidas como la reducción del precio del alquiler por ley, la prohibición de compras especulativas de viviendas, y la regularización de más de medio millón de migrantes para combatir el racismo y la violencia. Por su parte, Sánchez ha defendido los logros de su gobierno, incluyendo el aumento del salario mínimo y ha expresado su deseo de continuar con reformas progresistas, siempre que cuente con el apoyo parlamentario necesario.










