El Consejo de Ministros ha dado luz verde a la orden de ejecución que permite avanzar en el diseño y edificación de dos buques de acción marítima (BAM) para la Armada, con una inversión superior a los 716 millones de euros.
Navantia será la encargada de llevar a cabo la construcción de estas embarcaciones en su astillero de Puerto Real, Cádiz, tal como lo confirmó el pasado viernes la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. El proyecto deberá completarse antes del 30 de noviembre de 2029.
Desde el Gobierno se ha comunicado que el objetivo de esta iniciativa es preservar la capacidad de la Armada para contribuir al Núcleo de Fuerza Conjunta (NFC) y mejorar la eficiencia en las misiones de vigilancia y seguridad marítima, además de reforzar la respuesta a otras posibles situaciones operativas.
Montero añadió que la firma del contrato implicará la creación de aproximadamente 2.000 puestos de trabajo directos e indirectos, y garantiza actividad en los astilleros hasta el año 2030.