La representante de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ha expresado este miércoles su insatisfacción con el conjunto de medidas anticorrupción anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, calificándolas de ‘insuficientes’ frente a una ‘crisis política, de legitimidad, de credibilidad y de confianza’ que podría desencadenar un ‘ciclo reaccionario y recentralizador de involución democrática y social’. ‘Si la corrupción es estructural, estructural debe ser la respuesta’, ha declarado.
‘La crisis es grave. Muy grave, señor Sánchez. Una crisis política, de legitimidad, de credibilidad y de confianza. Y no será fácil recuperarla. Pero, sobre todo, es una crisis que puede abrir la puerta de par en par a la regresión en libertades y en derechos’, ha destacado, enfatizando que ‘la situación es sumamente delicada’, no por la estabilidad del Ejecutivo, sino ‘por las consecuencias que esta crisis puede tener para nuestro país, la ciudadanía vasca y las clases populares y trabajadoras’.
En una intervención crítica con el presidente, la diputada abertzale ha exigido que se depure a fondo la corrupción, sin excepciones: ‘Queremos contundencia con todos, para depurarlo todo. Con el mismo nivel de exigencia para todos. Caiga quien caiga en todos los ámbitos. Porque seremos muy exigentes con los políticos corruptos, pero también lo seremos con las empresas corruptoras, con las fuerzas de seguridad corrompidas y los jueces y tribunales que participen de ello’.
La portavoz de Bildu ha señalado que la corrupción es estructural e inherente al sistema político español. ‘Sistémica, sí. Es el propio régimen establecido en el 78, mantenido hasta hoy sin una verdadera ruptura democrática, lo que permite mantener la corrupción en todas sus versiones: la política sí, pero también la económica, la judicial o la policial’, ha explicado.
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