Carlos Fernández Carriedo, consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta de Castilla y León, ha manifestado la importancia de equilibrar la preservación del lobo con la seguridad de las comunidades rurales. ‘En la Comunidad hemos hecho un esfuerzo y garantizado la persistencia del lobo, lo que ha permitido aumentar el número de manadas, pero también hay que proteger a una especie que, sin duda, merece la protección, que es el ser humano en el mundo rural’, ha subrayado.
En una rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, Fernández Carriedo ha indicado que esta política es apoyada por la mayoría de las Comunidades, el Parlamento Europeo, la Comisión Europea y los pactos internacionales enfocados en la salvaguarda del lobo.
Ha enfatizado que tanto el Congreso de los Diputados como el Senado comparten una visión ‘idéntica’ a la de la administración regional. Sin embargo, ha criticado al Gobierno central por su divergencia en este asunto, instándolo a abandonar ‘motivos ideológicos’ y a considerar ‘la realidad del territorio’ para mejorar su compromiso con ‘los agricultores, ganaderos y personas que viven en el mundo rural, que son quienes mejor protegen la naturaleza’.
Con respecto a la futura reunión de la Comisión Sectorial sobre el lobo, solicitada por varias comunidades, Carriedo ha mostrado su esperanza en que se lleve a cabo y ha asegurado que la Junta continuará ‘insistiendo y haciendo valer la ley, que fue aprobada legítimamente por el Congreso de los Diputados’.
El portavoz ha expresado su confianza en que el Gobierno ‘escuche’, ‘no todo el mundo puede estar equivocado’, y atienda a ‘la posición de tantas instituciones y actores’ que abogan por un balance entre la conservación del lobo y la defensa del mundo rural.