Este domingo, el Gobierno de China ha instado a Estados Unidos a no interferir en la concesión de un contrato a Huawei por parte de España, destinado a la gestión y el almacenamiento digital de escuchas policiales. Según Pekín, este sistema será un espacio ‘seguro’ que protegerá los datos sin permitir accesos externos.
Un portavoz de la Embajada de China en España ha expresado su descontento a través de un comunicado, respondiendo a la carta del 16 de este mes enviada por Tom Cotton y Rick Crawford, representantes republicanos en las comisiones de Inteligencia del Congreso de EE.UU. En ella, solicitan a Tulsi Gabbard, directora de la Inteligencia Nacional de EE.UU., evaluar sus acuerdos con España en este campo tras la adjudicación a Huawei.
El contrato, valorado en 12,3 millones de euros y gestionado por el Ministerio del Interior español, fue revelado por ‘The Objective’. Este acuerdo permite a Huawei manejar las escuchas telefónicas autorizadas judicialmente.
‘Le escribimos para instarle a que revise los acuerdos de intercambio de inteligencia con el Gobierno de España para garantizar que la información compartida con los servicios de inteligencia, defensa y aplicación de la ley españoles no revele secretos de seguridad nacional de Estados Unidos al Partido Comunista de China (PCCh)’, indicaba la carta publicada en el sitio web de Cotton.
Además, en la carta se critica que ‘Huawei tiene estrechos vínculos con el PCCh y está sujeta a las leyes de Inteligencia Nacional y Seguridad de Datos de China, que obligan a Huawei a proporcionar al PCCh el acceso a cualquier información que este considere necesaria’, sugiriendo un posible ‘acceso secreto al sistema de intercepción legal de un aliado de la OTAN’.
UN ACTO DE ‘BULLYING’
El portavoz de la embajada china tachó la carta de ‘un acto típico de bullying’ y acusó a Estados Unidos de ‘difamar, restringir y atacar a empresas chinas globalmente’. Según el portavoz, Estados Unidos carece de ‘pruebas convincentes’ y debería ‘respetar la ciencia y el sentido común’.
Por su parte, China valora la cooperación económica y comercial con España, basada en ‘respeto mutuo, igualdad y ganancia compartida’, y espera que España mantenga un entorno empresarial justo y equitativo para las empresas chinas, conforme a la apertura y transparencia del mercado y las leyes vigentes.