El colectivo Via Laietana 43, compuesto por entidades en favor de los Derechos Humanos y la memoria histórica, ha emitido alegaciones contra la decisión del Gobierno de seguir destinando el inmueble de la Jefatura Superior de Policía de Barcelona para fines policiales. Solicitan que este lugar se transforme también en un espacio dedicado a la memoria, dada su historia ligada a la represión durante la era franquista.
Insisten en que la instalación deje de funcionar como cuartel de la Policía Nacional y se convierta completamente en un centro de memoria, para asegurar que la medida no se quede en “un gesto simbólico”, según ha comunicado la plataforma este jueves.
En las 12 enmiendas presentadas, además de pedir el fin de las actividades policiales, proponen que el edificio y su archivo sean transferidos a la Generalitat. Reclaman que cualquier planificación del espacio memorialístico incluya las opiniones de las víctimas y las asociaciones: “No puede ser un proyecto hecho desde los despachos”, declaró la portavoz Pilar Rebaque.
Además, el grupo propone retrasar cualquier obra en el edificio hasta que se defina el proyecto memorialístico, que debería servir tanto de recurso educativo como de promoción de los Derechos Humanos y no limitarse a reconocer únicamente el franquismo, sino también abordar la “represión y la impunidad prolongada durante años” en la Transición.
Los promotores han señalado que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, representa un obstáculo para la redefinición del lugar, y han advertido: “Si no se introducen cambios [en el proyecto], corremos el riesgo de blanquear la impunidad en lugar de combatirla”.
Por este motivo, han organizado una manifestación “en favor de que se haga justicia con las víctimas de la represión y la tortura” el próximo 23 de noviembre frente a la Jefatura.
