El PSOE y sus aliados planean aprobar rápidamente una reforma del Reglamento del Congreso que permitiría sancionar a periodistas acreditados que interfieran con las operaciones parlamentarias y de prensa en la Cámara, a quienes califican como ‘pseudoperiodistas’. Se espera que la medida sea aprobada en dos sesiones plenarias este mes de julio, una el próximo martes y otra en la penúltima semana, según fuentes parlamentarias comunicaron a Europa Press.
Esta reforma, propuesta tras varios incidentes con periodistas de medios digitales enfrentándose a políticos y otros periodistas, busca regular la renovación de credenciales y establecer un régimen sancionador para quienes perjudiquen la actividad de la institución o el trabajo de otros medios.
Con esta medida, grupos como el PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria buscan responder a las solicitudes de colectivos de periodistas que han pedido a la Cámara ‘evitar comportamientos inaceptables en el ejercicio del periodismo’. El propósito, subrayan, es no limitar a los profesionales sino actuar contra ‘activistas de ultraderecha’ que participan en conferencias de prensa.
Desde 1982, el Reglamento del Congreso delegó a la Mesa de la Cámara la responsabilidad de otorgar acreditaciones a los medios, pero la nueva reforma pretende regular este proceso y establecer ‘los requisitos que resulten exigibles’. Además, se creará un Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria, que podrá proponer sanciones, aunque la decisión final recaerá en la Mesa.
Por otro lado, la propuesta del PP, según informes de Europa Press, sugiere eliminar toda regulación sobre las acreditaciones de prensa, argumentando que la Presidencia del Congreso ya tiene atribuidos los poderes necesarios para manejar el orden público dentro de las dependencias parlamentarias y puede ‘adoptar cuantas medidas considere oportunas’. Vox, en cambio, busca eliminar el uso de lenguas cooficiales y otras medidas en su enmienda de totalidad.
Se espera que los textos alternativos del PP y Vox se debatan y voten el 8 de julio. Sin embargo, con el apoyo de otros grupos, es probable que la propuesta del PSOE y sus socios avance. La aprobación final se anticipa para una sesión plenaria especial hacia el 22 de julio.











