El secretario de Organización y coportavoz de Podemos, Pablo Fernández, ha afirmado este lunes que la extensión hasta 2026 del llamado escudo social, que incluye medidas como la prohibición de desahucios para personas vulnerables, es “insuficiente” y que hacen falta decisiones mucho más “radicales”, entre ellas fijar por ley una bajada de los precios de los alquileres.
La formación morada, que junto a otros grupos como ERC y Sumar llevaba semanas reclamando la ampliación de ese escudo social, ha visto finalmente cómo el Gobierno ha anunciado un pacto con EH Bildu para prolongarlo hasta 2026. Según ha explicado Fernández, Podemos tuvo conocimiento de este acuerdo el pasado fin de semana y considera que se ha logrado gracias a la “presión social”: “Sólo faltaría que el Gobierno dejase en la estacada y dejase desamparadas a 60.000 familias”, ha recalcado.
No obstante, ha insistido en que la medida le parece “insuficiente” y que, aunque en Podemos no albergan “ninguna esperanza” en el actual Ejecutivo, seguirán exigiendo “mucho más”, como contratos de alquiler indefinidos, la prohibición de comprar vivienda si no es para residir en ella o la reducción de los precios de los alimentos y de los suministros esenciales.
A continuación, Pablo Fernández ha criticado que, en la coyuntura actual, las grandes compañías del país estén obteniendo beneficios récord mientras una parte importante de la población no logra llegar a fin de mes, incluso contando con un empleo. “Hay gente que tenga que estar cortando la calefacción en casa porque no le llega el presupuesto familiar para poder calentar sus hogares. Esto no puede ser”, ha enfatizado.
En su balance político, el dirigente de Podemos ha apuntado que muchas personas perciben que este Gobierno “les está abandonando” y “dejando en la estacada”, al no reforzar su protección social y, en paralelo, incrementar el gasto en defensa, algo que ha descrito como una política de “embudo social”.
“Lo ancho para el gasto militar, para la industria armamentística, para (Donald) Trump, para la OTAN, para los rentistas, para las grandes empresas, y lo estrecho para todo lo demás, para el estado del bienestar, para los servicios públicos, para las clases trabajadoras en general. Esto es absolutamente insostenible”, ha denunciado Fernández, reiterando que el Ejecutivo debería priorizar el bienestar social frente al aumento del presupuesto militar.