El Partido Popular ha presentado una Proposición No de Ley (PNL) en el Congreso de los Diputados con el objetivo de promover la exclusión del lobo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE), así como la implementación de controles poblacionales mediante la caza en áreas naturales protegidas y una gestión eficaz de los depredadores y especies invasoras exóticas.
En la misma línea, ha instado al Gobierno a adecuar la tenencia de animales utilizados en la caza a los estándares de bienestar animal, asegurando que sean compatibles con esta actividad, “en coherencia con las peculiaridades de su labor y transmitiendo los verdaderos valores de la actividad cinegética”.
Reivindicación del Valor de la Caza
Esta propuesta surge poco después de que Podemos y Alianza Verde propusieran una legislación para incluir a los perros de caza en la Ley de Bienestar Animal. En su PNL, el PP urge a la Cámara Baja a reconocer el valor “estratégico” de la caza como una práctica sostenible y vital para la biodiversidad, y a valorar el amplio respaldo social que recibe.
El documento, que se debatirá en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación, también solicita que se considere la caza sostenible como parte esencial del patrimonio cultural español, promoviendo el respeto y la coexistencia con las demandas urbanas.
Además, se pide al Gobierno que utilice la caza como herramienta clave en la gestión de la naturaleza, resaltando su papel en la prevención de incendios, la reducción de accidentes de tráfico y la prevención de enfermedades zoonóticas.
El PP también ha reclamado que se respeten las modalidades de caza establecidas, siempre que se realicen de forma técnica y ordenada. “Apoyaremos al sector cinegético español ante las autoridades europeas en aquellas cuestiones que se puedan considerar contrarias al derecho nacional”, han declarado desde el partido.
Finalmente, la proposición aboga por una mayor formación para los cazadores, la participación del sector en órganos consultivos y la promoción de una percepción social positiva de la caza, facilitando la inclusión de nuevos participantes y la eficiencia administrativa.
