Los aliados del Gobierno, tanto dentro de la coalición como entre sus apoyos parlamentarios, junto con la oposición encabezada por el PP, han reiterado su rechazo a la posición del Ejecutivo en relación con el Sáhara Occidental y a su alineamiento con las tesis de Marruecos, durante la comparecencia en el Pleno del Congreso del ministro de Exteriores, José Manuel Albares.
Albares ha acudido a la Cámara Baja, entre otros motivos, a instancias del PP, para detallar la posición del Gobierno sobre la antigua colonia española y las consecuencias derivadas de la última resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que renueva el mandato de la MINURSO y llama a las partes a negociar tomando como referencia el plan de autonomía marroquí.
Desde el PP, su portavoz de Exteriores, Carlos Floriano, ha vuelto a cargar contra el giro dado por el Ejecutivo en el Sáhara Occidental, después de que el presidente, Pedro Sánchez, respaldara el plan de autonomía de Rabat sin ofrecer explicaciones ni recabar el apoyo del Parlamento –“imagino que la UCO en poco tiempo nos hará saber o nos aportará luz al respecto”, ha ironizado–.
En palabras de Floriano, “la falta de transparencia y oscurantismo son las constantes en la relación con Marruecos”. “Ustedes se acercan a Marruecos desde la debilidad, han claudicado y han abandonado al pueblo saharaui”, ha afeado al ministro.
El dirigente ‘popular’ ha recordado que el Gobierno considera que la propuesta de autonomía impulsada por Marruecos para el Sáhara Occidental es “la base más seria, realista y creíble”, y ha insistido en que, si así fuera, “por qué no se explicita en qué consistiría” –Rabat solo presentó un texto de tres folios que no ha sido desarrollado– y “por qué se ha prolongado la Misión de la ONU para el Referéndum en el Sáhara Occidental” (MINURSO).
Asimismo, ha reprochado al Ejecutivo que las aduanas de Ceuta y Melilla sigan “cerradas”, pese a que uno de los compromisos alcanzados con Marruecos en abril de 2022 contemplaba la apertura de una nueva en Ceuta y la reapertura de la ya existente en Melilla. “No está normalizado el tránsito como debería estarlo”, ha recalcado, pidiendo a Albares que priorice esta cuestión.
El portavoz de Vox, Carlos Flores Juberías, también ha sacado a colación el asunto de las aduanas, además de denunciar que los marroquíes constituyen la segunda nacionalidad en número de delincuentes y criticar que se haya permitido a Marruecos integrarse en la organización del Mundial de Fútbol de 2030 junto a España y Portugal. “Desde que usted está en el Gobierno, no hay partido entre España y Marruecos que no acabemos perdiendo por goleada”, ha lamentado.
Flores ha acusado además al ministro de citar solo fragmentos de la resolución de la ONU y de asumir el “vocabulario” de Rabat, cuestionando que la autonomía sea la mejor salida para el Sáhara Occidental al no existir “ni un solo ejemplo en todo el mundo en el que la autonomía territorial funcione en un contexto de autocracia” como el marroquí.
Críticas de los socios de coalición al cambio de rumbo
Las objeciones no se han limitado a la oposición. Desde los socios de coalición también se ha cuestionado la estrategia del Ejecutivo. La diputada de Sumar Tesh Sidi, de origen saharaui, ha recriminado al PSOE que se haya apartado de lo que defendía en su programa electoral de 2019 y ha censurado que el ministro no mencionara en su intervención la situación de los refugiados saharauis.
En referencia a Marruecos, la parlamentaria de Sumar ha recordado que su política de Estado se basa en “patria, dios y rey”. Y patria, ha subrayado dirigiéndose a Albares, “no es solo el Sáhara Occidental, son las aguas de Canarias, son Ceuta y Melilla, y son sobre todo la instrumentalización, incluso de menores como hemos podido ver en 2022, para su política migratoria”.
También desde Sumar, el diputado Agustín Santos ha defendido que la cuestión del Sáhara tiene “una posible solución” pero que esta “tiene que incluir un punto esencial, la libre determinación del pueblo saharaui”.
“Si no se llega a esa situación de posible arreglo, habrá una inestabilidad permanente en la zona que irá en contra de los intereses de todos, de Marruecos, de Argelia, de España, del pueblo saharaui”, ha avisado, instando a “poner manos a la obra para ayudar a que se produzca el proceso de negociación y ayudar a las partes a que encuentren ese punto de acuerdo que sea asumible por ellas”.
Comparación entre la postura sobre palestinos y saharauis
El diputado de ERC, Francesc Álvaro Vidal, ha puesto el foco en el reciente acuerdo agrícola entre la UE y Marruecos, criticando que el PSOE lo respaldara en la Eurocámara y remarcando que el Sáhara Occidental sigue siendo un territorio pendiente de descolonización.
Asimismo, ha censurado que se haga “un paréntesis” en la defensa de los Derechos Humanos cuando se trata de los saharauis, frente al respaldo que sí se ofrece a los palestinos. “No podemos aceptar esta moral de geometría variable”, ha señalado.
En términos similares se ha expresado la portavoz de Junts, Marta Madrenas. “España sigue sin asumir sus responsabilidades 50 años después”, ha denunciado. “España como Estado ha dado la espalda al pueblo saharaui, primero con el abandono, luego con la indiferencia y ahora con el alineamiento con la potencia ocupante”, ha acusado, reclamando al ministro que aclare si España da ya por descartado el referéndum y reivindicando el derecho de autodeterminación.
Por su parte, el portavoz de EH Bildu, Jon Iñarritu, ha reprochado a Albares que la coherencia que el Gobierno invoca en relación con la creación de un Estado palestino no se aplique al Sáhara. “En el caso saharaui no creen que los saharauis tienen también derecho a tener un estado”, ha denunciado.
En esta materia, ha sostenido, “están solos y en minoría” porque carecen del respaldo de Sumar y del resto de socios parlamentarios, así como del PP y de Vox, algo que, a su juicio, “les debería hacer reflexionar”.
En la misma línea, la portavoz del PNV, Maribel Vaquero, ha preguntado al ministro: “¿No cree que los saharauis tienen derecho a decidir su futuro sin condicionamientos de la mano de Marruecos o incluso de su mano? ¿Van a garantizar ese derecho?”. Al mismo tiempo, ha lamentado que “Marruecos gana peso en su carrera para legitimar en el plano internacional su postura” y que el Gobierno español “es el operador necesario para esta injusticia”.
El diputado de Podemos Javier Sánchez Serna ha advertido de que el Ejecutivo ha aceptado que Marruecos sea “el Estado guía del norte de África” según los intereses de Estados Unidos y la UE y que se convierta “en el gendarme del Magreb”. A su juicio, esto acarreará “importantes consecuencias no solo para el Sáhara sino para Ceuta y Melilla, para Canarias y para las relaciones con Argelia”.











