Vox ha presentado un veto en el Senado a la Ley de Movilidad Sostenible, argumentando que el proyecto gubernamental ‘subordina las políticas nacionales a una estrategia supranacional de descarbonización impuesta desde Bruselas’, en referencia a la Agenda 2030.
El partido liderado por Santiago Abascal, que previamente se había opuesto a esta ley junto al PP en el Congreso, anticipa su veto en la Cámara Alta, argumentando que el texto ‘limita la soberanía energética, la libertad de los ciudadanos y la capacidad de decisión de España’.
‘En definitiva, este proyecto no responde a una necesidad real de los españoles, sino al cumplimiento de compromisos adquiridos por el Gobierno con la Comisión Europea en el marco de los fondos europeos Next Generation EU, así como a los objetivos del Pacto Verde Europeo y de la Agenda 2030’, señala el comunicado de Vox.
Aunque Vox sostiene que la ley contempla implementar peajes en autovías, esta medida no se incluyó finalmente en el texto legal. Sectores económicos, como el de las concesionarias de autopistas, han expresado su decepción por la exclusión de los peajes en autovías, una medida que el Gobierno ha evitado al terminar los contratos con empresas privadas en autopistas existentes.
Por otro lado, Vox critica que el nuevo esquema de concesiones de autobuses, que inicialmente implicaba la eliminación de paradas en áreas rurales, está siendo revisado tras la negativa de las comunidades autónomas a gestionar los nuevos itinerarios.
Además, el partido se opone a la obligatoriedad de crear Zonas de Bajas Emisiones en ciudades de más de 50.000 habitantes, argumentando que ‘restringe la circulación en miles de municipios y castiga a quienes no pueden adquirir un vehículo nuevo o eléctrico’.















