La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha alertado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre las consecuencias económicas adversas que podrían afrontar los estadounidenses si se imponen aranceles a España debido a la insuficiencia del gasto en defensa, que no alcanza el 5% del PIB español.
El martes, Trump insinuó la posibilidad de establecer aranceles a España por diferencias en el gasto de defensa. Al día siguiente, Yolanda Díaz se dirigió a él en los pasillos del Congreso para comunicarle que las medidas punitivas que busca aplicar no solo afectarían a España, sino que también tendrían un impacto negativo en los Estados Unidos.
Díaz señaló que actualmente la balanza comercial entre ambos países es deficitaria para España, y que las políticas «de odio» que Trump podría implementar acabarían perjudicando a los propios estadounidenses. A pesar de ello, afirmó que el Gobierno español protegería a sus industrias en caso de que se concretaran los aranceles.
La vicepresidenta concluyó enfatizando la soberanía nacional: «En España mandan los españoles y las españolas, no el señor Trump», y añadió que España «no es su protectorado».
Las importaciones españolas desde Estados Unidos, particularmente en sectores como tecnología, energía y bienes industriales, superan significativamente a las exportaciones. Hasta julio, el déficit comercial de España con Estados Unidos ascendió a 8.235 millones de euros.