Aitor Esteban, líder del EBB del PNV, expresó su descontento por la visita del Rey Felipe VI a Guernica, tachándola de insuficiente ya que no incluyó un pedido de perdón por el bombardeo histórico ni gestos hacia el autogobierno vasco. El mandatario español acompañó al presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, quién sí pidió disculpas por el ataque nazi a este municipio en 1937.
Esteban encabezó la comitiva del PNV que asistió a esta ceremonia, subrayando la importancia del acto por parte del líder alemán, un gesto que los vascos habían esperado durante mucho tiempo. Destacó el simbolismo de Guernica en el contexto global como representante de las injusticias históricas.
EL «DEBE» DEL ESTADO ESPAÑOL
El dirigente jeltzale argumentó que, al igual que Alemania ha reconocido sus errores del pasado, el Estado Español debería hacer lo mismo. Criticó la falta de un gesto similar por parte del Rey Felipe VI, sugiriendo que su presencia debería haber sido más que la de un simple acompañante, especialmente considerando la restauración de la monarquía por Franco y la transición política subsiguiente en España.
Esteban concluyó que la visita del Rey, siendo la primera desde la de su padre Juan Carlos I en 1981, debió ser más significativa y no solo protocolaria, enfatizando que, después de tantos años, la falta de un compromiso claro fue una oportunidad perdida.