La decisión de À Punt de transmitir una corrida de toros durante la duodécima manifestación exigiendo la renuncia del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha sido severamente criticada por trabajadores de la cadena, PSPV-PSOE, Compromís y Ens Uneix. La manifestación, que coincidió con la trágica dana del 29 de octubre que resultó en 229 fallecidos, no fue cubierta en directo por la radiotelevisión pública valenciana.
Un comunicado con el hashtag #LaPlantilladÀPNoCalla, compartido en redes sociales, revela la “enorme vergüenza” de los empleados por la elección de la dirección, que desacreditó a la cadena ante la opinión pública. “La dirección de À Punt es la principal culpable, pero también lo son todos los miembros del Consejo de Administración que lo permiten”, enfatizaron los trabajadores.
“Con el silencio cómplice de la dirección de informativos, À Punt dio la espalda al clamor del pueblo para pedir responsabilidades al presidente Mazón y a su gobierno en la mayor desgracia reciente en el País Valencia. ¡La plantilla no calla!”, concluyeron.
Ricard Gallego, consejero de À Punt y representante de los municipalistas, manifestó su “rechazo más absoluto” a que la cadena no emitiera la protesta, destacando la importancia simbólica de la fecha. “No fue una manifestación cualquiera”, sostuvo, y exigió una explicación pública sobre los criterios que llevaron a no interrumpir la emisión de la corrida de toros para cubrir el evento.
Gallego también anunció que llevarán este asunto al próximo Consejo de Administración del ente público y esperan obtener una explicación “clara y convincente”.
“Queremos expresar nuestro desacuerdo con esta forma de gestionar la radiotelevisión pública valenciana, la de todos y todas. Nosotros creemos que À Punt tiene la responsabilidad de garantizar una información plural y de servicio público, especialmente en momentos tan importantes para la sociedad valenciana como los que estamos viviendo. Desde aquí, nuestro reconocimiento y apoyo a todas las víctimas de la fatídica barrancada del pasado 29 de octubre, ahora hace un año”, expresó Gallego.
Beatriu Cardona, portavoz de Intersindical Valenciana, calificó lo sucedido como “miserable” y criticó duramente la decisión en sus redes sociales. “Burlarse de las víctimas y de sus familiares de la manera en la que lo hicisteis es de lo más bajo de podéis caer”, indicó.
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana y secretaria general del PSPV-PSOE de la ciudad de València, Pilar Bernabé, describió esta acción como “un insulto más” a las víctimas de la dana y al pueblo valenciano. “Dignidad vs vergüenza. Este es el gobierno más indigno que ha tenido la Comunitat Valenciana”, afirmó.














