Organizaciones como Covite y la Fundación Fernando Buesa expresan su decepción por la “inacción o negativa” de algunos grupos políticos para establecer sanciones contra quienes enaltecen a ETA. Subrayan la ausencia de un “consenso básico” en torno a lo “inmoral e inadmisible” de dichas acciones y la necesidad de un sistema punitivo similar al que castiga el enaltecimiento del franquismo.
Recientemente, la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados aprobó una propuesta de UPN para detener los homenajes públicos a miembros de ETA, con apoyo de PP y Vox, pero con oposición de PSOE y Sumar. PNV y EH Bildu también se desmarcaron de esta iniciativa.
Según han comunicado Covite y la Fundación Fernando Buesa a través de redes sociales, los tribunales han indicado reiteradamente que estos homenajes no constituyen delito. Sin embargo, desde 2022, los ‘ongi etorris’ han cesado, más por presiones políticas y sociales que por un cambio de actitud ética, según estas asociaciones.
Además, mencionan que los homenajes no son las únicas manifestaciones de apoyo a ETA, señalando la existencia de pintadas, pancartas, manifestaciones y tributos a miembros fallecidos de la banda. Insisten en la urgencia de un régimen sancionador que penalice estas expresiones de enaltecimiento terrorista, similar al que ya existe para el franquismo.
