El Ejecutivo estudiará la suspensión de un programa educativo en Madrid y recuerda a Ayuso la obligación de acatar la ley

El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha anunciado que su ministerio revisará la decisión de la Consejería de Educación madrileña de suspender un curso destinado a la formación de profesores en materia de memoria democrática. Además, ha hecho un llamamiento a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, para recordarle que la Ley de Memoria Democrática debe ser cumplida por todas las comunidades autónomas.

Según una noticia publicada por El País, el curso titulado ‘Abordar el franquismo y la memoria democrática en las aulas’ fue retirado temporalmente por no contar con la validación necesaria del Centro Territorial de Innovación y Formación Madrid-Norte, aunque más tarde se reveló que la causa de la retirada fue la percepción de un “sesgo político” por parte de la Dirección General de Bilingüismo y Calidad de la Enseñanza.

En un acto en el Congreso, Torres criticó a la administración de Ayuso por impedir que los docentes eduquen sobre el franquismo, a pesar de que este tema es parte del currículo educativo. El ministro subrayó la importancia de enseñar a los jóvenes sobre los riesgos de los regímenes totalitarios y la pérdida de libertades, especialmente cuando, de acuerdo con encuestas, crece el apoyo a estos sistemas entre los jóvenes.

“Eso tiene que estar en las aulas. Por supuesto que analizaremos lo que acaba de hacer la Comunidad de Madrid porque hay una Ley de Memoria Democrática de obligado cumplimiento en todas las comunidades”, enfatizó.

El ministro también comentó sobre las recientes declaraciones de algunos líderes autonómicos del PP, como Alfonso Rueda de Galicia, que han empezado a describir la ofensiva de Israel contra Gaza como “genocidio”, término que aún es evitado por la dirección nacional del partido. “Las cosas hay que llamarlas por su nombre, las palabras tienen alma, tienen sentido, tienen su historia, su etimología y hay que llamar las cosas como hay que llamarlas”, destacó, cuestionando el temor a reconocer abiertamente las atrocidades.