El Partido Popular aprovecha su dominio en el Senado para modificar la reforma de la Ley de Asociación y la remite de nuevo al Congreso.

El Partido Popular ha aprovechado su mayoría en el Senado para eliminar gran parte de la reforma de la Ley que regula el derecho de asociación, la cual fue promovida por el PSOE para permitir la disolución de organizaciones que apoyen el franquismo. En cambio, el partido ‘popular’ ha enfocado sus esfuerzos en sancionar la glorificación de grupos terroristas como ETA, aunque esta legislación regresa ahora al Congreso, que tendrá la última decisión. En resumen, en la sesión del Pleno de este miércoles se aprobó las diversas enmiendas que el PP ha añadido durante el proceso en el Senado, las cuales eliminan el primer apartado que mencionaba la opción de disolver asociaciones franquistas. Tal como se mencionó en el Congreso, su enfoque ha sido desmantelar las agrupaciones que glorifiquen el terrorismo o que generen «humillación» hacia las víctimas. De todas formas, este documento será presentado nuevamente en el Congreso para que tome una decisión acerca de estas enmiendas. Los abogados del Senado señalaron en un informe que esta reforma podría ser inconstitucional, pero la Mesa de la Cámara Alta optó por permitir su tramitación para evitar el riesgo de cometer un delito de prevaricación. El documento que fue aprobado en el Congreso indica que esta propuesta de ley tiene como objetivo cumplir con la disposición adicional séptima de la Ley de Memoria Democrática, promulgada en octubre de 2022, la cual ya contemplaba la modificación de la ley de asociaciones en este contexto. La norma aplica únicamente a asociaciones, puesto que las fundaciones, como la Fundación Franco, tienen un proceso de disolución diferente que está bajo la jurisdicción del Ministerio de Cultura dirigido por Ernest Urtasun, de Sumar, que comenzó los procedimientos pertinentes en junio pasado.