QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Diana Morant, secretaria general del PSPV-PSOE, ha celebrado una reunión este miércoles con alcaldes y portavoces socialistas de Valencia, zona impactada por la dana, al cumplirse nueve meses de la catástrofe. A la cita, descrita por fuentes del partido como una sesión de trabajo y partidaria, también se sumaron Arcadi España, secretario de Estado de Política Territorial, y Zulima Pérez, quien está designada para ser la nueva comisionada del Gobierno de España para la reconstrucción tras la dana.
En el encuentro, los funcionarios locales manifestaron su «satisfacción por la cercanía y el trabajo» realizado por la secretaria general y ministra junto al resto del equipo gubernamental enfocado en la reconstrucción.
Según el PSPV, la reunión comenzó con el «reconocimiento» al trabajo de José María Ángel, excomisionado para la dana que renunció luego de ser investigado por supuesta falsificación de un título académico, y la «confianza» en que Zulima Pérez, ya integrante del equipo de Arcadi España, seguirá una línea similar.
Fuentes partidarias informaron a Europa Press que se subrayó la continua labor del Gobierno de España durante agosto en las tareas de restauración de la dana, consideradas «una prioridad desde el pasado 29 de octubre».
Además, se criticó «la lentitud y falta de empatía» del gobierno valenciano del Partido Popular, acusándolos de concentrarse más en mejorar la imagen de Carlos Mazón que en atender adecuadamente los servicios que dependen de la Generalitat.
Por otro lado, Juanfran Pérez, secretario general del PPCV, reprobó la reunión por incluir solamente a la futura comisionada, cuyo nombramiento oficial está programado para el 26 de agosto, y por su carácter exclusivamente socialista. «Ya está bien de hacer de la tragedia una oportunidad política», declaró, señalando la decisión del gobierno de postergar el nombramiento oficial de la comisionada hasta finales de agosto, interpretando esto como una pausa en las labores de reconstrucción.
El representante del PP también cuestionó la exclusividad del encuentro, proponiendo que las primeras reuniones deberían incluir a todos los alcaldes sin distinción política. Afirmó que esta conducta demuestra un «trato preferencial» a los municipios gobernados por el PSOE y excluye a otros, describiéndolo como parte del «ADN del sanchismo: utilizar una tragedia como oportunidad política». Finalmente, exigió al gobierno de Pedro Sánchez y a Diana Morant que se enfoquen de manera genuina en la reconstrucción, evitando el sectarismo y la propaganda.
