El Ejecutivo español ha manifestado su complacencia este jueves tras la aprobación, por parte del Consejo de Seguridad de la ONU, de una resolución que apoya las negociaciones basadas en el plan de autonomía propuesto por Marruecos para el Sáhara Occidental. La resolución sostiene que una “verdadera autonomía” podría ser “la solución más factible” para solucionar el conflicto.
Durante la declaración conjunta emitida por España y Marruecos después de la XIII Reunión de Alto Nivel (RAN), se señaló que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “ha reiterado la posición de España sobre la cuestión del Sahara Occidental”.
El texto remite a la declaración conjunta del 7 de abril de 2022, que marcó la reconciliación tras una crisis diplomática significativa entre ambos países, tras la reunión entre Sánchez y el rey Mohamed VI en Rabat.
En la declaración se enfatiza que “España reconoce la importancia de la cuestión del Sáhara Occidental para Marruecos, así como los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos en el marco de las Naciones Unidas para encontrar una solución mutuamente aceptable”.
RESPALDO A LA RESOLUCIÓN DE LA ONU
Tras la RAN, y sin una rueda de prensa posterior, el Gobierno finalmente se ha pronunciado sobre la resolución adoptada el 31 de octubre por el Consejo de Seguridad, que también renovó el mandato de la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO).
“España acoge con satisfacción la adopción de la resolución 2797 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”, reza la declaración, destacando algunos puntos que han sido valorados por Marruecos, cuyo monarca ha declarado que esta resolución marca “un nuevo y victorioso capítulo” en el conflicto que dura ya 50 años.
La resolución apoya “plenamente la labor del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y su enviado personal, Staffan de Mistura, para facilitar y celebrar negociaciones tomando como base la propuesta de autonomía de Marruecos con miras a lograr una solución de la controversia que sea justa, duradera y aceptable para todas las partes, con arreglo a la Carta de las Naciones Unidas, y acoge con beneplácito cualquier sugerencia constructiva de las partes en respuesta a la propuesta de autonomía”.
Se destaca también que la resolución considera que “una verdadera autonomía bajo soberanía marroquí podría ser la solución más factible”, lo cual ha sido especialmente bien recibido en Rabat, al ver reconocidas sus posturas.











