El ejecutivo español ha mostrado su complacencia este jueves ante la resolución emitida por el Consejo de Seguridad de la ONU hace un mes, que favorece las negociaciones basadas en el plan de autonomía propuesto por Marruecos para el Sáhara Occidental. Según este acuerdo, se considera que una ‘verdadera autonomía’ podría ser la alternativa más viable para solucionar esta disputa.
La aceptación de este planteamiento, que se incluye en la declaración conjunta de España y Marruecos al concluir la XIII Reunión de Alto Nivel celebrada en el Palacio de la Moncloa, ha sido prontamente aplaudida por Marruecos. Este país ve en la resolución un fuerte respaldo a su postura de hacer de su plan de autonomía la única solución posible y obtener reconocimiento de la soberanía sobre la que fue su colonia, aún considerada por la ONU como territorio a descolonizar.
La declaración, de 23 páginas y 119 puntos, cita al Sáhara Occidental solamente en uno de ellos, el octavo, donde también se señala que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ‘ha reiterado la posición de España sobre la cuestión del Sahara Occidental’.
Esta posición se remite a la declaración conjunta del 7 de abril de 2022, que marcó la reconciliación tras un intenso conflicto diplomático entre ambos países. En esta, ‘España reconoce la importancia de la cuestión del Sáhara Occidental para Marruecos, así como los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos en el marco de las Naciones Unidas para encontrar una solución mutuamente aceptable’.
En este marco, ‘España considera la iniciativa de autonomía marroquí, presentada en 2007, como la base más seria, realista y creíble para resolver este diferendo’, en consonancia con lo expresado por Sánchez en su carta de marzo de ese año al rey Mohamed VI.
RESPALDO A LA RESOLUCIÓN DE LA ONU
Además, en la declaración emitida tras esta reunión, donde no se ofreció rueda de prensa, el Gobierno finalmente se ha posicionado a favor de la resolución adoptada el pasado 31 de octubre por el Consejo de Seguridad. Esta resolución renovó el mandato de la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO), aunque el Ministerio de Asuntos Exteriores había evitado previamente valorarla.
‘España acoge con satisfacción la adopción de la resolución 2797 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas’, se afirma en la declaración, y se subrayan puntos específicamente valorados por Marruecos, cuyo rey ha declarado que abre ‘un nuevo y victorioso capítulo’ para resolver el conflicto después de 50 años.
El documento respalda ‘plenamente la labor del secretario general (de la ONU, Antonio Guterres) y su enviado personal (Staffan de Mistura) para facilitar y celebrar negociaciones tomando como base la propuesta de autonomía de Marruecos con miras a lograr una solución de la controversia que sea justa, duradera y aceptable para todas las partes, con arreglo a la Carta de las Naciones Unidas, y acoge con beneplácito cualquier sugerencia constructiva de las partes en respuesta a la propuesta de autonomía’.
Asimismo, se destaca que la resolución reconoce que ‘una verdadera autonomía bajo soberanía marroquí podría ser la solución más factible’ para una solución mutuamente aceptable, una perspectiva particularmente bien recibida en Rabat, que ve en ello un respaldo a sus posturas.
RABAT CELEBRA EL POSICIONAMIENTO DE ESPAÑA
La importancia de este tema para Rabat es evidente, como lo demuestra la rápida reacción de la agencia oficial de noticias de Marruecos, MAP, que ha destacado el respaldo de España a la resolución de la ONU con un titular que reza: ‘Sáhara marroquí: España se felicita de la adopción de la resolución 2797 que subraya que una verdadera autonomía bajo soberanía marroquí es una solución de las más realizables’.
La agencia refleja el contenido de la declaración y resalta que el Gobierno español también ha ‘reafirmado su posición constante y constructiva’ expresada anteriormente en abril de 2022. Además, se considera que con su postura respecto a la resolución, España confirma su ‘apoyo activo’ a la actual hoja de ruta de la ONU, ‘que pone la iniciativa marroquí en el corazón del proceso de arreglo’.
