Este jueves, la fundación FAES ha expresado una fuerte crítica hacia Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, acusándolo de ‘mentir’ durante el debate en el Congreso sobre corrupción. Según FAES, Sánchez se dedicó a ‘inundar de porquería una sesión convocada para rendir cuentas’ y lo censuró por referirse a los gobiernos de José María Aznar como algunos de ‘los más corruptos de la historia’, cuando en realidad, asegura que ningún ministro de Aznar ha cometido ‘ilícito penal alguno por nada que tuviera que ver con su Gobierno’.
En el debate, Sánchez también sostuvo que su administración es la más transparente de la democracia española, comparándola favorablemente con las de José Luis Rodríguez Zapatero, Felipe González y los gobiernos del PP bajo José María Aznar y Mariano Rajoy. Además, calificó al gobierno de Aznar como ‘el más corrupto’, mencionando ’34 casos de corrupción’ aún en proceso judicial, con ‘362 cargos implicados’ y un desvío de ‘más de 1.000 millones de euros’.
‘PARA SÁNCHEZ DEBATIR ES MENTIR, GOBERNAR ES REPTAR’
FAES destacó que el 9 de julio pareció ser para Sánchez ‘su particular día del Orgullo Corrupto’, criticando su falta de principios éticos. ‘Para Sánchez debatir es mentir, gobernar es reptar y el Parlamento un embudo donde el Gobierno controla y fiscaliza a la oposición, con la cooperación necesaria del bloque de investidura’, comentó la fundación en un comunicado titulado ‘Cuando gobernar es reptar’. Además, FAES afirmó que Sánchez siempre se inclina por la ‘línea de mayor abyección’ y lo comparó con ‘artistas enloquecidos empeñados en dorar oro puro o blanquear azucenas’, mientras él se centra en ‘estercolar letrinas’.
FAES también subrayó que ni los ministros de Aznar, ni sus allegados, ni familiares estuvieron implicados en delitos penales relacionados con su gestión, y destacó la integridad académica y profesional de Aznar, a diferencia de las acusaciones lanzadas por Sánchez. La fundación también criticó las intervenciones de los portavoces de ERC, Junts y Bildu, Gabriel Rufián, Miriam Nogueras y Mertxe Aizpurúa, respectivamente, durante el debate, señalando un manejo cuestionable de la sesión por parte de la presidenta de la Cámara.