QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha instado a Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, a dimitir tras la sentencia impuesta al fiscal general del Estado, argumentando que la única opción honorable es la renuncia, dado que el fiscal se convirtió en un “peón” en una “operación política” en contra de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.
El Tribunal Supremo ha sancionado al fiscal general con una inhabilitación de dos años y una multa de 7.200 euros por un delito de revelación de secretos hacia Alberto González Amador, pareja de Ayuso, a quien además se le deberá compensar con 10.000 euros por daños morales.
Ayuso ha expresado su satisfacción por el fallo del Supremo, recalcando que es un triunfo para la democracia y una derrota para el uso indebido del poder estatal con fines políticos. “Un español ha vencido al aparato del Estado que ha ido contra él simplemente por su relación personal con ella. Se han revelado secretos de un ciudadano y la justicia ha imperado en España”, han comunicado desde su entorno.
FEIJÓO: EL FALLO “MARCA UN ANTES Y UN DESPUÉS”
Desde la sede del PP, Feijóo ha destacado que este fallo no solo tiene repercusiones legales, sino también profundas consecuencias políticas. Ha criticado al fiscal general por su conducta, que ha calificado de totalmente contraria a la dignidad y responsabilidad de su cargo, implicándolo en una maniobra orquestada por el Ejecutivo.
“FUE SÁNCHEZ QUIEN LIDERÓ ESTE BOCHORNO INSTITUCIONAL”, declaró Feijóo, señalando directamente al presidente del Gobierno por su papel en esta controversia y por su intromisión en el poder judicial, lo cual considera un abuso de poder y un ataque a la independencia judicial.
Feijóo también ha pedido que Sánchez se disculpe tanto con la justicia como con los ciudadanos españoles, y ha reiterado que la decencia requeriría que Sánchez dimitiera y permitiera a los ciudadanos decidir el futuro del país en las urnas. Sin embargo, duda que Sánchez tome la “salida digna”. Finalmente, el líder del PP ha reafirmado su respeto por la independencia judicial y ha enfatizado que los abusos de poder son finalmente juzgados y condenados en una verdadera democracia.
