Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, ha expresado su firmeza en cuanto a la aplicación de las nuevas normas de gestión del trasvase Tajo-Segura, advirtiendo que si estas no se efectivizan para finales de septiembre, tanto él como su gobierno tomarán “acciones procesales para que se cumplan”. Durante una entrevista concedida a Castilla-La Mancha Media y difundida por Europa Press, destacó la existencia de hasta cinco fallos del Tribunal Supremo y diversas directivas europeas que apoyan los derechos de la cuenca originaria.
“Si termina septiembre y no se ha hecho, no solo tendrá que denunciarse, sino que estaré dispuesto a acciones procesales para que se cumplan”; subrayó García-Page. Además, mostró su preocupación por el posible retraso en la ejecución de estas medidas, calificándolo como “un incumplimiento flagrante de sentencias”, aunque se mostró confiado en que el Gobierno finalmente mostrará la voluntad necesaria para llevarlas a cabo.
