Varios miles de manifestantes, predominantemente jóvenes, se congregaron el pasado domingo en San Sebastián, siguiendo el llamado de Ernai, la organización juvenil de la izquierda abertzale, para exigir la independencia y conmemorar a Jon Paredes Manot ‘Txiki’ y Ángel Otaegi en el aniversario número 50 de su ejecución durante el franquismo.
La protesta inició en el Boulevard donostiarra después de las regatas de La Concha, bajo la consigna en euskera ‘Ekin eta bultza askatasunera!’ (empujando hasta la libertad). Entre los asistentes figuraban veteranos líderes de la izquierda abertzale como Joseba Álvarez o Rufi Etxeberria, portando ikurriñas y banderas de Navarra y Palestina, mientras proclamaban lemas en euskera a favor de la independencia, el socialismo y el pueblo palestino.
En un punto de la Avenida de la Libertad, se desplegó una pancarta con las imágenes de ‘Txiki’ y Otaegi, donde se rindió tributo con bengalas y música de Mikel Laboa, coreando ‘borroka da bide bakarra’ y ‘Herriak ez du barkatuko’ (el pueblo no perdonará).
«TESTIGO DE LA LUCHA»
El acto culminó de nuevo en el Boulevard, donde Ernai realizó un acto político, enfatizando que la actual generación está dispuesta a «recoger el testigo de la lucha» de ‘Txiki’ y Otaegi, y reafirmando que la independencia es «la única vía para construir un país libre de opresión». Amaiur Egurrola, portavoz de Ernai, recordó el fusilamiento y subrayó que aquel acto buscaba «acabar con Euskal Herria», mientras reiteraba el compromiso juvenil con la independencia de una Euskal Herria «independiente, socialista y feminista».
Egurrola también denunció la reciente «ofensiva contra los independentistas de izquierdas» y llamó a la movilización en próximos eventos en Pamplona y Bilbao, destacando la necesidad urgente de lucha en estos tiempos.