La presidenta de la Junta de Extremadura en funciones, María Guardiola, ha reiterado que “Extremadura merece una política de altura”, ejercida con “rigor, seriedad y respeto a la ciudadanía”, por lo que ha reclamado detenerse “en lo que nos une y apartemos lo que nos diferencia”.
En su intervención ha subrayado que “el insulto no construye carreteras, la crispación no abre quirófanos”, mientras que la concordia y el diálogo sí lo hacen, de modo que “gobernar para todos, piensen lo que piensen, es la única forma de gobernar con dignidad”.
“En estas fechas pido que nos detengamos en lo que nos une y apartemos lo que nos diferencia”, una actitud que, ha dicho, debe asumirse “por el bien de Extremadura”, de las instituciones autonómicas y de la convivencia social.
María Guardiola ha lanzado este mensaje de Fin de Año en la noche de este miércoles, 31 de diciembre, desde Bodegas Romale, en la localidad pacense de Almendralejo, a la que ha definido como “referente” de los cavas y vinos extremeños.
El discurso, emitido por Canal Extremadura Televisión y recogido por Europa Press, ha arrancado con una cita del músico extremeño Robe Iniesta, recientemente fallecido, que, a juicio de la presidenta, hoy interpela a la región: “Si fuera mi vida una escalera, me la he pasado entera buscando el siguiente escalón”, ha indicado.
Ha descrito a Extremadura como una tierra que ha avanzado “de peldaño en peldaño, de corazón en corazón, pero siempre hacia arriba”, en palabras de la propia dirigente autonómica.
“Acaba un año intenso”
A lo largo de su alocución, María Guardiola ha señalado que “acaba un año intenso” y ha recordado que “toda tierra exige diálogo y progreso”, invitando a imaginar “juntos una Extremadura plural, abierta y en movimiento”.
Así, ha afirmado que “la política no es otra cosa que la gestión de ese deseo. Esa arquitectura de convivencia”, y ha defendido la necesidad de seguir mejorando sin detenerse.
En estos días “para la celebración y el recogimiento”, la presidenta en funciones ha querido tener presentes a quienes ya no están, entre ellos el presidente Guillermo Fernández Vara, fallecido este 2025, de quien ha destacado que “su ejemplo de serenidad y diálogo quedará para siempre”.
También ha invitado a “pensar en lo que alcanzamos y en lo que nos queda aún por conseguir juntos”, y ha remarcado que “Extremadura es hoy una región con más oportunidades”, además de “una tierra que se construye con certezas”, algo que, ha subrayado, “ha sido un trabajo de todos”.
Competir “sin complejos”
En su balance del año 2025, la jefa del Ejecutivo regional en funciones ha puesto en valor a las empresas extremeñas, que “están haciéndose un hueco en el mercado nacional e internacional”, “compitiendo sin complejos” y “demostrando que desde Extremadura se puede crecer y liderar”.
Ha destacado igualmente que, en los diez primeros meses de 2025, las exportaciones de la comunidad han aumentado un 20 por ciento y han superado los 3.400 millones de euros, al tiempo que Extremadura registra “la menor tasa de paro de su historia y hay más personas que nunca trabajando”.
Se trata, ha dicho, de “una realidad que habla de avances y de confianza”, por lo que ha agradecido a empresas y autónomos su contribución a la creación de empleo y su “gran trabajo diario”.
Guardiola ha puesto el foco también en la ciudadanía extremeña que “cada mañana suma, que levanta persianas y pregunta al paciente cómo está al borde de su cama, que ordena la fila en el recreo, que acompaña a una persona mayor en su quehacer diario”, entre otras tareas cotidianas.
“Extremadura avanza porque la ciudadanía así lo trabaja”, ha reiterado, antes de remarcar que la región es “convivencia y esfuerzo común” y “un engranaje humano que avanza unido hacia el progreso, hacia la estabilidad, hacia el futuro”.
“Somos la memoria de los que nos precedieron y fueron parte de este camino. Y seremos lo que queramos ser”, ha concluido en este tramo del mensaje.
Desafíos para 2026
Mirando a 2026, la presidenta de la Junta en funciones ha advertido de que Extremadura encara “muchos desafíos pendientes”, y que “el primero y más urgente es proteger lo que nos sostiene: la economía y el bienestar de las familias”.
Ha reconocido que llenar la nevera, pagar la factura de la luz o hacer frente a la hipoteca “sigue siendo una batalla diaria para muchos hogares”, por lo que “el gobierno de la Junta debe ser un escudo para ellos”, de manera que “la prosperidad no sea sólo una estadística, sino la tranquilidad de llegar a fin de mes”.
En este sentido, ha subrayado que “gestionar es cuidar de lo esencial”, lo que implica “garantizar unos servicios públicos que nos protejan”, como una sanidad “más ágil y más humana”; una educación que “estimule el talento” de los jóvenes y les facilite el acceso al mercado laboral; y una atención a los mayores que “les devuelva, con gratitud y dignidad, todo lo que ellos nos dieron”.
Ha remarcado asimismo que “Extremadura tiene una raíz profunda en campo”, y que “el respeto al medio rural se demuestra con hechos”, como “defendiendo el esfuerzo de los agricultores y ganaderos” o “garantizando que vivir en un pueblo no signifique tener menos derechos”.
El campo, ha insistido, “no es nuestro pasado”, sino “empuje y futuro”, y ha definido este sector como “la despensa de Europa y el guardián último de nuestro paisaje”.
“Extremadura no se apaga”
En otro momento de su discurso, María Guardiola ha asegurado que “Extremadura no se apaga”, y ha avisado de que no van “a permitir que se desmantele nuestra capacidad industrial ni nuestra soberanía energética”, de forma que “el no al cierre de Almaraz es un sí al empleo” y al desarrollo económico.
Desde “este rincón de paz que es Extremadura”, la presidenta en funciones ha enviado también un mensaje de dolor por las guerras y su “anhelo de paz a todos los lugares donde el conflicto aplasta a la esperanza”.
Ha recordado igualmente a la galerista Helga de Alvear, fallecida este año, a la que ha descrito como “una mujer que amó Extremadura y nos regaló su mirada y su legado inmenso”, y que mostró que “el arte contemporáneo puede convivir con las piedras centenarias”.
En esta línea, y tomando su ejemplo, Guardiola ha avanzado que van “a empujar con toda nuestra alma para que Cáceres sea Capital Europea de la Cultura en 2031”.
En la parte final de su mensaje, María Guardiola ha animado a los extremeños a ser ambiciosos y felices, a seguir “subiendo, juntos, el siguiente escalón” y a caminar “siempre hacia arriba”, con la vista puesta en el futuro de la región.