Carlos Mazón, el ‘president’ de la Generalitat Valenciana, ha revelado la implementación de un nuevo esquema para manejar los desechos, con el objetivo de asistir a los ayuntamientos en el tratamiento de los escombros resultantes de las obras de reconstrucción después de la dana del 29 de octubre pasado.
El líder del Consell ha comunicado a los ayuntamientos afectados por las inundaciones que especifiquen los lugares donde guardan los residuos, principalmente escombros de las labores de rehabilitación, que en su mayoría se depositaron en áreas donde, tras las inundaciones, se amontonaron objetos y voluminosos ya evacuados, según comunicó la administración autonómica.
Mazón ha subrayado que este nuevo plan «se suma al dispositivo de choque inicial de la Generalitat para retirar y gestionar más de 800.000 toneladas de residuos, incluyendo voluminosos y enseres mezclados con barro, vehículos siniestrados y lodos». «Todos ellos, considerados residuos domésticos de titularidad municipal, fueron gestionados por el ejecutivo autonómico para agilizar la recuperación», añadió.
Tras el cierre de los Puntos de Acopio Local una vez limpiados, estos lugares han sido reutilizados y varios municipios han requerido apoyo para eliminar nuevos montones de escombros originados en obras menores de demolición y construcción, indicó el ‘president’.
Aunque la responsabilidad de estos residuos domésticos recae en las entidades locales según la legislación vigente, «el compromiso del Consell es continuar con el apoyo y la ayuda en la reconstrucción», explicó Mazón. «Atenderemos estas peticiones con el objetivo de dejar las parcelas libres y facilitar que, en el futuro, puedan volver a gestionarse siguiendo los cauces habituales», destacó.
Para coordinar la eficaz retirada de estos escombros, la Generalitat ha pedido a los consistorios que formalicen las solicitudes de ayuda, especificando las localizaciones donde se han acumulado los escombros.
PLAN DE CHOQUE INICIAL
Las riadas generaron más de 800.000 toneladas de residuos, cantidad comparada con los desechos urbanos anuales de toda la Comunitat Valenciana o el 11 por ciento del total anual en España. Para enfrentar este desafío, «se activó un plan de choque para retirar los residuos de las zonas urbanas, trasladarlos a los puntos de transferencia habilitados y reducir su impacto ambiental y sanitario en un programa dotado con casi 180 millones de euros», informó Mazón.











