La secretaria de Estado de Seguridad, Aina Calvo, ha admitido este jueves en el Congreso de los Diputados que comparte la “preocupación” por el repunte de denuncias por violencia sexual y acoso contra mujeres. Ha recalcado que su departamento ha puesto a disposición de la ciudadanía los recursos policiales necesarios para hacer frente a esta problemática y garantizar la tramitación de estas denuncias.
“Lo que no tendríamos que tener es agresiones de ese tipo en ningún sitio, en ninguna sede de ningún partido, incluido el mío”, ha señalado la ‘número dos’ del Ministerio al aludir al PSOE, durante su intervención en la Comisión de Interior, donde se analizaba el aumento de violaciones y denuncias por delitos contra la libertad sexual de las mujeres.
Con estas palabras respondía al PP, que había sacado a colación el caso del exasesor socialista Francisco Salazar y la decisión de la vicepresidenta del Gobierno y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, de “borrar las denuncias de sus propias compañeras”.
“El incremento de denuncias creo que señala que muchas mujeres han dicho que hasta aquí, y da igual quién sea el agresor, si pertenece a un partido político, pertenece a las fuerzas y cuerpos de seguridad, es médico o no tiene formación”, ha indicado la secretaria de Estado de Seguridad, destacando que el aumento de casos registrados refleja una mayor disposición de las víctimas a dar el paso.
En esta línea, la ‘número dos’ de Interior ha insistido en que lo esencial es que las mujeres marquen ese “hasta aquí” y se animen a denunciar. “Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado saben que atienden las denuncias, actúan en términos de investigación bajo mandato judicial y tratan de esclarecer los casos”, ha remachado, defendiendo el trabajo policial y el compromiso institucional frente a las agresiones sexuales.
