La Oficina de Conflictos de Intereses (OCI), que forma parte del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, ha determinado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no estaba obligado a abstenerse en la reunión del Consejo de Ministros que aprobó el rescate financiero de Air Europa. Se estableció que su esposa, Begoña Gómez, no tenía vínculos laborales con la aerolínea en cuestión.
Este dictamen llega tras la orden del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de revisar una queja del Partido Popular. Este último sostenía que Sánchez no debería haber intervenido en la decisión debido a la ‘relación personal’ de Gómez con la empresa.
La OCI ya había emitido un veredicto similar en marzo de 2024, cuando el PP solicitó por primera vez una evaluación sobre un posible conflicto de intereses de Sánchez, ya que la empresa Wakalua, subsidiaria de Globalia, patrocinaba el Africa Center, un proyecto liderado por Gómez en el Instituto de Empresa.
A pesar de esto, el Partido Popular recurrió al TSJM por una supuesta falta de argumentación por parte de la OCI, y el tribunal les dio la razón, indicando que no se había realizado una investigación adecuada.
La resolución de la OCI se basó en un informe de la Secretaría General de la Presidencia, que confirmaba que Gómez no tenía ni ha tenido vínculos laborales o profesionales que implicaran una posición de dirección, asesoramiento o administración en Air Europa o Globalia.
El PP DESTACA LA RAPIDEZ EN RESOLVER
El PP ha señalado la rapidez con la que la Oficina de Conflictos de Intereses desestimó la denuncia contra Sánchez por el caso de Air Europa. A pesar de que tenían hasta el 8 de noviembre para resolver, la decisión se tomó con celeridad, algo que ha llamado la atención del partido, que aún espera recibir la notificación oficial del archivo.
Antes de decidir los próximos pasos, incluyendo la posibilidad de acudir a los tribunales, el PP quiere examinar a fondo los argumentos que sustentan la decisión de la OCI.