El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha descartado este lunes la propuesta lanzada por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, para llevar a cabo una remodelación del Ejecutivo. A su juicio, esa iniciativa equivale a "ofrecer sacrificios en el altar": “Que piensen en otra cosa”. Además, ha interpelado a Díaz sobre si en esa eventual reestructuración del Gobierno entrarían también los ministros de Sumar.
Puente se ha pronunciado en una entrevista en TVE, recogida por Europa Press, donde se le ha cuestionado qué tipo de gestos prevé el Gobierno para responder al malestar de Sumar ante la aparición de distintos casos de corrupción y acoso en el PSOE.
El titular de Transportes ha recordado a la vicepresidenta que la potestad de remodelar el Gobierno corresponde exclusivamente al presidente y que plantearlo en este contexto supone "ofrecer sacrificios en el altar", algo que ve más cercano a un ritual religioso que a una decisión política. También ha afirmado que no ve relación entre un caso de acoso en Monforte de Lemos o en Almussafes y un cambio en la composición del Consejo de Ministros. "No sé qué va a resolver", ha señalado.
SERÍA OFRECER SACRIFICIOS EN EL ALTAR
En esa misma línea, ha preguntado a Yolanda Díaz si su propuesta abarca también a los representantes de Sumar en el Ejecutivo: "No sé si también hay que remodelarlos a ellos". A continuación, ha recordado el caso de Íñigo Errejón, quien fuera portavoz de Sumar en el Parlamento y que se vio obligado a dimitir tras ser objeto de acusaciones de acoso sexual.
"No recuerdo desde luego ningún ministro del Partido Socialista que saliera a pedirle a la señora Díaz que hiciera un cambio en su estructura de partido, ni siquiera en el propio Gobierno", ha enfatizado.
Aun así, ha matizado que cualquiera puede plantear lo que considere oportuno, pero cree que las propuestas deben tener "coherencia" para que la ciudadanía pueda comprender cuál es su objetivo real.
QUE SUMAR PIENSE EN OTRA COSA
"Que piensen en alguna otra cosa", ha reiterado, insistiendo en que una remodelación del Ejecutivo no guarda relación con los casos que se están conociendo. Ha subrayado que los relevos en el Gobierno no son el instrumento adecuado para atajar el acoso o la corrupción. "O es que la corrupción está en el Gobierno o es que hay algún caso de acoso en el gobierno", ha planteado.
En todo caso, ha dicho comprender el enfado dentro del espacio de Yolanda Díaz por los episodios de corrupción, así como el malestar de muchos votantes progresistas. Ha asegurado que comparte ese sentimiento porque "da mucha rabia" que haya personas que hayan antepuesto sus intereses particulares actuando con "mucha estupidez", ya que, además de perjudicar a la organización, han dañado el sistema político y se han perjudicado a sí mismos.
El ministro también ha respondido a la crítica de la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, que lamentó que dirigentes relevantes del PSOE no hayan salido con más contundencia a pronunciarse sobre los casos de acoso sexual dentro del partido.
LA ALCALDESA TIENE RAZÓN
Puente ha expresado un profundo respeto "muchísimo" hacia la regidora coruñesa, a la que ha calificado de "extraordinaria" y de "mujer muy inteligente". Ha reconocido que "probablemente tenga razón en alguna de las cosas que dice", pero considera que lo esencial es valorar cómo está reaccionando el partido, recordando que ninguna formación política está libre de machismo porque éste "permea en la sociedad de arriba abajo".
En este sentido, ha destacado que todas las personas sobre las que pesa una acusación o una sospecha fundada de comportamientos inaceptables han sido apartadas de la organización, por lo que entiende que el PSOE "está reaccionando como debe hacerlo".
Ha añadido que otra cuestión distinta es que los dirigentes estén "más o menos acertados" en sus mensajes públicos, ya que considera complejo pronunciarse sobre personas con las que han compartido militancia y trato cercano y sobre las que nunca habían tenido sospechas. "La verdad es que a muchos hombres en el Partido Socialista esto nos ha pillado completamente descolocados, tengo que admitirlo", ha concluido.
A su juicio, todo lo ocurrido servirá para asumir que no pueden relajarse ni pensar que, por pertenecer al PSOE, están inmunizados frente a este tipo de conductas, admitiendo que en este caso puede haber habido un exceso de confianza.
En cuanto a su lectura del momento político, el ministro sostiene que es similar a la de hace uno o dos años: una derecha que "no acepta los resultados electorales y que busca todas las fórmulas posibles para intentar que la legislatura acabe cuanto antes". Pese a ello, ha remarcado que, aunque la situación sea complicada, el Gobierno continuará adelante porque cuenta con una hoja de ruta definida.