El PNV ha expresado su decepción ante la falta de una disculpa del Estado español y, en particular, de su representante máximo, el rey Felipe VI, por el bombardeo de Gernika, calificándolo como “una oportunidad perdida”. Mientras tanto, el PSE-EE sostiene que el Gobierno no debería pedir perdón y el PP también se opone a que el rey haga tal petición. Por otro lado, EH Bildu considera que la asistencia del monarca a un acto en la villa foral “humilla” a las víctimas de dicho suceso.
En una discusión en Radio Euskadi, diversos parlamentarios vascos comentaron sobre el acto de homenaje a las víctimas del bombardeo, acontecido en presencia del presidente alemán Frank-Walter Steinmeier, el rey Felipe VI y el lehendakari, Imanol Pradales. Ainara Zelaia, del PNV, opinó que fue una ‘oportunidad perdida’ del Estado Español y su cabeza visible, el rey, para pedir ‘perdón’ y honrar a quienes sufrieron la atrocidad de 1937, cuando Gernika fue ‘bombardeada indiscriminadamente’.
Zelaia aclaró que no se trata de ‘espiar culpas’ ya que ‘efectivamente la jefatura del Estado nada tiene que ver con el levantamiento o la sublevación militar que se produjo en el 37’, pero insiste en que un ‘pequeño gesto de reparación’ por parte del rey habría sido significativo. Resaltó que el Estado alemán ha demostrado un reconocimiento continuo del daño causado, a pesar de su falta de relación directa con el gobierno nazi que perpetró la atrocidad.
Desde EH Bildu, Ander Goikoetxea criticó la presencia del rey en los eventos de Gernika, señalando que ensombrecía la memoria de las víctimas del bombardeo y del franquismo. Propuso que la mejor forma de pedir perdón sería mediante la abdicación del rey y la instauración de una república que reconociera los derechos nacionales de Euskal Herria.
Por otro lado, Itxaso Asensio, del PSE-EE, y Laura Garrido, del PP, defendieron la posición de que ni el Gobierno ni el rey deberían pedir perdón, argumentando que vincular al gobierno actual con el régimen dictatorial es ‘bastante injusto’ y que el rey ya ha demostrado su reconocimiento hacia las víctimas simplemente con su presencia.