Pablo Fernández, Secretario de Organización y coportavoz de Podemos, ha calificado de «absolutamente lamentable» la posición del PP en materia de anticorrupción después de la imputación del exministro Cristóbal Montoro, y opina que esto desacredita completamente el llamado a la decencia de Alberto Núñez Feijóo, quedando «invalidado».
«El Partido Popular es a la lucha contra la corrupción lo que Donald Trump a la diplomacia», expresó Fernández en una conversación con Europa Press, haciendo alusión al proceso judicial abierto en Tarragona contra Montoro por supuestamente beneficiar a empresas gasísticas mientras estaba en el cargo, a través de leyes propuestas por Equipo Económico (EE).
Fernández también destacó el «funcionamiento corrupto» del sistema bipartidista, incluyendo tanto al PP como al PSOE, acusándolos de parasitar las instituciones para su «beneficio propio». Criticó duramente que Montoro sea investigado por la supuesta creación de leyes «favorables para sus amigotes» mientras implementaba «salvajes recortes y amnistías fiscales para defraudadores» desde su posición en el Ministerio de Hacienda.
El representante de Podemos enfatizó que el PP «debería dar muchísimas explicaciones» y reiteró la acusación de que es el «partido más corrupto de Europa». «Esta imputación de Montoro pues es un nuevo caso más de corrupción y un nuevo caso de utilización espuria de las instituciones en beneficio propio», añadió Fernández, quien concluyó que el PP «no está legitimado en modo alguno para dar consejos o criticar» sobre la corrupción.
Durante una visita en Barcelona, Ione Belarra, secretaria general de Podemos, también se pronunció sobre la situación de Montoro, asegurando que «no era un representante público» sino un «comercial de las empresas gasísticas». «Los representantes del PP son lacayos de las grandes empresas», sentenció Belarra.
Además, Pablo Fernández mencionó el caso de la exmilitante socialista Leire Díez, implicada en un presunto tráfico de influencias, lo que según él, requiere que el PSOE y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «tienen que dar muchas explicaciones». Destacó que este caso «huele mucho a cloacas» y que Díez, lejos de ser una simple militante, tenía una posición importante en Correos y estaba vinculada con altos cargos del PSOE.