Alfonso Serrano, secretario del PP madrileño y presidente de la Comisión Organizadora del Congreso, ha instado este viernes a los aliados del PSOE a aclarar «qué ganan sosteniendo un Gobierno que está hasta las cejas de corrupción».
«Creo que los socios del Gobierno de Sánchez, aquellos que le auparon en la moción de censura y aquellos que también le han dado sus votos en la última investidura, deben decidir de qué lado están», ha manifestado Serrano a la prensa en Ifema, horas antes del inicio del XXI Congreso nacional extraordinario del PP.
El líder del PP ha subrayado que si el Ejecutivo «resiste es porque sus aliados lo apoyan», tras «todo lo conocido» sobre los supuestos casos de corrupción que involucran al PSOE y al círculo cercano a Sánchez. «Y lo que hay que preguntar es por qué sus socios lo apoyan. Esa es la pregunta», enfatizó.
Según Serrano, Bildu respalda a Sánchez ya que el gobierno ha «blanqueado a los herederos de ETA» y, «en contraprestación», el partido de Arnaldo Otegi «le blanquea su corrupción». También mencionó que Junts favorece la continuidad de Sánchez por intereses propios que perjudican la igualdad entre los españoles.
Al tocar el tema del PNV, Serrano reveló que «en esta trama de corrupción ya hay incluso personas, empresarios vinculados» a Santos Cerdán, ex alto cargo del PP, «que también tienen vínculos con el PNV». «Son los socios los que tienen que explicar qué ganan sosteniendo a un gobierno que está hasta las cejas de corrupción», agregó.
APOYO A FEIJÓO DESDE EL PP DE MADRID
Desde la llegada de Feijóo a la presidencia del PP hace tres años, el PP de Madrid «ha estado siempre al servicio de la dirección nacional», según Serrano. «Y siempre que han tratado de fichar talento, pues nosotros hemos estado encantados y orgullosos de contribuir al proyecto que dirige y preside Feijóo», declaró.
Destacó el «orgullo» que siente el PP de Madrid porque Alma Ezcurra, eurodiputada de esta región, asuma la vicesecretaría de Coordinación Sectorial del partido. Serrano también apuntó que las críticas de la izquierda a los cambios en el PP son señal de que «no podrían ser mejores».
