Este lunes, la Princesa Leonor ha dado inicio a su último periodo de formación militar en la Academia General del Aire ubicada en San Javier, Murcia, completando así el tercer curso de su preparación como futura capitana general de las Fuerzas Armadas al asumir el trono.
Después de su formación en la Academia General del Ejército de Tierra en Zaragoza y en la Escuela Naval Militar de Marín, incluyendo seis meses de navegación en el ‘Juan Sebastián Elcano’, la alférez Borbón ahora se prepara como piloto en su cuarto curso.
La formación de la heredera ha sido personalizada para permitirle un conocimiento profundo de los tres ejércitos y la vida militar, similar a la educación que recibieron su abuelo, Juan Carlos I, y su padre, Felipe VI, preparándola para sus futuras responsabilidades.
En la base de San Javier, Leonor será entrenada en el manejo de los aviones Pilatus PC-21, que han reemplazado a los antiguos C-101. El coronel Luis González Asenjo, director de la Academia, no ha especificado cuándo se realizará el primer vuelo de la alférez con su instructor.
ENTRENAMIENTO COMO PILOTO
El entrenamiento inicial toma entre un mes y mes y medio e incluye formación técnica y práctica en simuladores. La formación comienza en un simulador CBT, seguido por el más avanzado FTD, donde los alumnos experimentan condiciones de vuelo cercanas a la realidad y se entrenan en situaciones de emergencia.
Después de las simulaciones, se realizan vuelos reales, alternados con más sesiones en simulador, sumando entre 50 y 60 horas de práctica. La ‘suelta’, o primer vuelo solo, dependerá de la habilidad del alumno, sin confirmarse aún para la Princesa.
UNA ALUMNA MÁS DE LA ACADEMIA
Al igual que en sus anteriores academias, en San Javier, la Princesa de Asturias es tratada como cualquier otro alumno, compartiendo alojamiento y sujetándose a la misma rutina diaria. Disfrutará de las tardes libres y permisos de fin de semana, como sus compañeros.
Finalizado este curso en julio próximo, comenzará su etapa universitaria, probablemente en España, siguiendo el camino académico de su padre.