Marga Prohens, presidenta del Govern, ha interpretado la sentencia del Tribunal Supremo (TS) contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, como un reflejo del deterioro que Pedro Sánchez ha causado a la democracia. Según Prohens, esta condena «inhabilita todo aquello que representa» el presidente del Gobierno.
Este jueves, tras la divulgación de la sentencia que inhabilita a García Ortiz por dos años y le impone una multa de 7.200 euros por un delito de revelación de secretos hacia Alberto González Amador —pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso—, quien además recibirá 10.000 euros por daños morales, Prohens ha expresado su postura. El Supremo ha dictado que la acción del fiscal va más allá de un simple acto individual, condenando una «manera de hacer y de entender la política» que, según Prohens, degrada instituciones y persigue a adversarios políticos.
El veredicto del TS, que no fue unánime, contó con el apoyo de cinco magistrados y el voto en contra de las magistradas progresistas Ana Ferrer y Susana Polo, en un tribunal de mayoría conservadora. La decisión llega una semana después de un juicio histórico, marcando la primera vez que un fiscal general del Estado es juzgado.
«VIVIMOS HORAS GRAVES PARA LA DEMOCRACIA», ha declarado Prohens poco después, destacando la condena como un evento sin precedentes y criticando la gestión del Gobierno. Ha llamado a la unidad de los demócratas para proteger la democracia y ha criticado la reacción del ministro de Justicia, Félix Bolaños, ante la sentencia.
Llorenç Galmés, presidente del Consell de Mallorca, también ha condenado el impacto negativo del PSOE y de Sánchez en la democracia, exigiendo la dimisión del presidente del Gobierno por llevar al país a una «degradación institucional».











