La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha reiterado este jueves que las mujeres que han comunicado a Ferraz presuntos episodios de acoso tienen que “estar de acuerdo” para que la formación pueda presentar denuncias ante la Fiscalía y se inicie así una investigación en los tribunales.
Hasta ahora, la dirección del partido se ha mostrado reacia a acudir al ministerio público, alegando que las comunicaciones recibidas son anónimas y que la organización no puede dar ese paso sin el permiso expreso de las afectadas.
En declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso, Narbona ha explicado que la opción de trasladar los hechos a la Fiscalía está siendo estudiada por el servicio jurídico del PSOE, si bien ha subrayado de nuevo que “tienen que ser las denunciantes quienes estén de acuerdo con ello”.
A su juicio, el PSOE “está reaccionando” ante los distintos casos de acoso conocidos, primero en relación con el excargo de Moncloa y Ferraz Francisco Salazar y, más recientemente, con el ya expresidente de la Diputación de Lugo, José Tomé. “Tengo toda la confianza en que demos una respuesta contundente a lo que ha sucedido”, ha indicado antes de acceder al Hemiciclo.
El partido sigue teniendo pendiente la publicación del informe interno sobre las denuncias contra Salazar, registradas hace más de cuatro meses, en julio. La propia organización ha admitido falta de diligencia en la tramitación del expediente, al no haberse puesto en contacto con las denunciantes hasta varios meses después de que remitieran su testimonio a través del canal interno y anónimo habilitado por Ferraz.
Además, al ser interpelada por la carta difundida este mismo jueves por la exdirigente socialista Elena Valenciano, en la que reclama a los hombres del PSOE que se impliquen en erradicar el machismo dentro de la organización, Narbona ha manifestado que es “una gran mujer y una gran feminista”.











