Montse Mínguez, vocera del PSOE, ha comentado que todavía hay tiempo para asegurar los votos necesarios en la próxima votación del Congreso sobre la reducción de la jornada laboral prevista para este miércoles. Aunque ha enfatizado que si la propuesta no prospera, no se considerará una derrota para el Gobierno, sino que serán los partidos opositores quienes deberán justificar su posición.
Durante una conferencia de prensa en la sede del PSOE en Ferraz, después de la reunión de la Ejecutiva Federal, Mínguez destacó que la iniciativa podría beneficiar a más de 12 millones de empleados y que aún quedan muchas horas antes del miércoles.
El debate en el Congreso se centrará en las enmiendas a la totalidad presentadas por el PP, Vox y Junts, quienes rechazan que la jornada laboral se reduzca de las actuales 40 horas semanales a 37,5.
Mínguez señaló que existen más trabajadores a favor de esta medida que detractores, y subrayó que, dada la estabilidad de la jornada laboral durante los últimos 40 años y los avances tecnológicos recientes, es factible llevar a cabo esta disminución horaria.
Se intentará en cualquier caso, si no sale adelante la votación no será una derrota del Gobierno sino que lo tendrán que explicar los partidos políticos que se oponen a esta medida que beneficia a millones de trabajadores
, ha indicado la portavoz.
