El Rey Felipe VI ha destacado la importancia crucial de ‘educar en valores’ para asegurar la ‘convivencia democrática’ y proporcionar a las futuras generaciones las capacidades necesarias para su desarrollo en un contexto global marcado por ‘dos extremos inquietantes’, el individualismo y la globalización.
Durante la entrega de los Premios Princesa de Asturias en el Teatro Campoamor de Oviedo, el monarca expresó que ‘vivimos en un mundo que se debate entre dos extremos que son, por igual, inquietantes’. Ha mencionado el ‘cultivo del individualismo radical que, si no se embrida de algún modo’, podría conducir a la indiferencia o a la soledad, un fenómeno paradójico en sociedades altamente conectadas pero aisladas a nivel personal.
Además, señaló a la ‘pulsión globalizadora que todo lo homogeiniza, que oscurece las diferencias, las singularidades, que degrada la diversidad’, a menudo en beneficio de comportamientos masivos influenciados por ‘los dictados, sutiles pero persistentes, de una red, de un algoritmo, de una pantalla’.
En este marco, Felipe VI sostuvo que la educación en valores ‘no consiste en negar la realidad que nos toca vivir, ni tampoco en huir de cambios tecnológicos que son ya parte de nuestra vida’, sino en buscar un equilibrio entre lo colectivo y lo individual, y abrir caminos para una vida más plena y consciente.
‘La convivencia democrática tiene su gran pilar en la educación’, enfatizó, destacando la importancia de transmitir a las nuevas generaciones los valores y principios esenciales. Los Premios Princesa de Asturias, dijo, tienen una ‘dimensión didáctica’ significativa en este sentido, celebrando a individuos cuyos logros son ejemplares, no para imitarse, sino para aprender de ellos.
El Rey también ha preparado el terreno para un mayor protagonismo de la Princesa Leonor, destacando su gradual asunción de responsabilidades y su madurez. Recordó sus 44 años de asistencia a los premios, de los cuales los últimos siete los ha compartido con su hija, indicando que es tiempo de ‘cederle ya este espacio’.
Finalmente, agradeció a la Fundación Princesa de Asturias y a los asturianos por su apoyo y cariño, asegurando su compromiso continuo con los premios y con la región de Asturias.














